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Cella recela del plan de gestión de la laguna del Cañizar encargado por el Gobierno de Aragón

El documento, que regulará los usos del humedal, ha sido bien recibido por los conservacionistas.

La laguna del Cañizar, cuyo plan de gestión estará redactado en el mes de septiembre.
La laguna del Cañizar, cuyo plan de gestión estará redactado en el mes de septiembre.
Jorge Escudero

Un plan de gestión regulará el funcionamiento de la laguna del Cañizar, un humedal cuya conservación ha sido motivo de enfrentamiento entre los regantes, los colectivos conservacionistas y la Administración. El Gobierno de Aragón acaba de adjudicar a través de la empresa pública Sarga la redacción del plan de gestión a Consultores en Biología de la Conservación S. L. por 34.107 euros. El documento estará redactado en septiembre y servirá de base a la negociación con todos los sectores implicados en la administración de la zona afectada en busca de una redacción final de consenso que será de obligado cumplimiento.

El jefe de servicio de biodiversidad de Departamento de Desarrollo Rural y Sostenibilidad, Manuel Alcántara, explicó que, en el proceso de participación previo al encargo, la población del entorno criticaba la falta de criterios claros sobre "qué se va a hacer con la laguna". El plan dará respuesta a esta pregunta al regular el manejo de la tajadera que permite almacenar agua, la limpieza de las acequias que posibilitan el riego en varias localidades del entorno, la utilización de los caminos del paraje y la caza, entre otros.

Alcántara añadió que aunque no se trate de un espacio protegido, la aplicación del plan contará con un órgano de seguimiento con la presencia de todos los afectados. El documento servirá para "echar a andar" en la gestión del espacio, pero será "revisable" en función de las circunstancias. El jefe de servicio se mostró convencido de que se pueden "compatibilizar" todos los intereses en liza. Señaló que, en contra de la queja de que se va a prohibir la caza, la actividad cinegética puede ser incluso "necesaria" para controlar la creciente colonia de jabalíes, por ejemplo.

El ámbito central del plan será la cubeta de la laguna, localizada entre Cella y Villarquemado, pero se extiende también a las cinco localidades que riegan del agua procedente del humedal. Las medidas previstas en el plan deberán someterse a un orden de prioridad para su desarrollo por las administraciones implicadas: la Confederación Hidrográfica del Ebro, la DGA y los ayuntamientos.

Las primeras informaciones sobre el plan de gestión han sido recibidas con recelo por el Ayuntamiento de Cella, una de las localidades más implicadas. El alcalde, Juan Sánchez, dijo que los vecinos "no ven clara" la utilidad del documento encargado por Sarga y se mostró convencido de que el pueblo "tiene mucho más que perder que ganar" con la regulación en trámite.

Para empezar, se negó a aceptar que en el Cañizar exista una laguna. A su juicio, se trata únicamente de un "humedal" que se encharca ocasionalmente. Recordó que el Ayuntamiento celebró un referéndum en abril de 2018 para decidir sobre la laguna y un 79% de los votantes se pronunciaron en contra de su protección.

Añadió que la experiencia de gestión del Cañizar ha sido hasta ahora negativa para Cella y advirtió de que lo que se vaya a hacer con la laguna "lo tendrán que decidir" los vecinos del entorno. "Cuando haya una propuesta de gestión, Cella se pronunciará", concluyó.

José Carlos Rubio, investigador de la laguna y que participó en su recuperación, considera por el contrario que es "necesario y fundamental organizar la gestión" de este humedal. En su opinión, la planificación puede ser "útil" para resolver la conflictividad que existen.

La financiación del plan de gestión corre a cargo del programa europeo Wetnet que contempla la creación de una red de humedales mediterráneos en los que sea compatible la conservación con la actividad económica en el entorno.

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