Tractorada crítica de juguete por las calles de Huesca: "Con mis galletas no se juega"

Los tractores han vuelto este sábado a tomar las calles del centro de Huesca para escenificar el descontento del sector primario. Pero esta vez han sido de juguete, a pedales o con batería, y los han conducido más de  150 niños y niñas de familias de agricultores y ganaderos de las comarcas de Los Monegros y La Hoya encabezados por dos pancartas con los lemas 'Somos el relevo de Huesca' y 'Tractorada infantil, la semilla del campo alimenta la ciudad'.

La marcha, animada con música y el sonido de cencerros, ha salido a las 12.00 para recorrer el Coso Alto y subir luego por la calle Duquesa Villahermosa hasta la plaza de Luis López Allué, donde los promotores han leído un manifiesto ante más de 500 personas. 

Muchos de los niños y niñas llevaban sus propias pancartas adosadas a los tractores con mensajes como 'Quiero ser agricultor, no gestor' 'Sin campo, los pueblos se mueren', 'Mis cereales para desayunar aquí se tienen que sembrar', 'Yo quiero ser agricultora y ganadera como papá', 'Con mis galletas no se juega', 'Quiero comer las palomitas que produce mi papá' o 'Mi bisabuelo y mi abuelo eran agricultores, mi padre es agricultor y yo también quiero ser'.

Los convocantes han sido "familias de la provincia de Huesca que sentimos pasión por nuestro trabajo y que transmitimos ese amor por la ganadería y la agricultura a nuestra descendencia desde la cuna, tal y como hicieron nuestras generaciones anteriores con nosotros". 

Aseguran entender la agricultura y la ganadería "como una forma de vida, un oficio ancestral trasmitido de generación en generación y mostrando siempre un máximo respeto por nuestra tierra y los animales, buscando siempre la mejor calidad en nuestra producción". 

En su lista de reivindicaciones han destacado, el apoyo a los agricultores y ganaderos españoles, "esenciales para el futuro de nuestro territorio y de cuyo trabajo y esfuerzo depende la alimentación de la población"; a la ganadería extensiva "por su vertebración del territorio, aprovechando eficientemente los recursos de la zona, con las especies y razas autóctonas, compatibilizando la producción con la sostenibilidad y generando así servicio ambientales y sociales, como el control de incendios"; a la incorporación de jóvenes, "fomentando el relevo generacional, el desarrollo, la diversificación, el empleo y la creación de nuevos proyectos que dan vida al sector"; y a la incorporación de la mujer al mundo rural "como pilar imprescindible".

Además, han exigido al Ministerio de Agricultura, el departamento de Agricultura del Gobierno de Aragón y a la Unión Europea que en la toma de decisiones y redacción de normativa ambiental "tengan en cuenta la opinión de agricultores y ganaderos como principales conocedores del sector". Por último, han agradecido la "paciencia" y el "cariño" que les han mostrado los vecinos de la provincia de Huesca en sus actividades reivindicativas. 

La idea de esta original manifestación partió de tres amigas, Rebeca Rodríguez, Paula Cebollero y Ana Aniés, que residen en Albero Bajo, Chimillas  y Alerre, respectivamente, y cuya familias están fuertemente vinculadas al sector agrario."Queríamos intentar sensibilizar a la gente sobre la importancia que tiene el relevo generacional porque sin nuestros hijos e hijas no hay futuro en el campo ni en la ganadería", han destacado. "Y por ellos queremos seguir adelante para que puedan trabajar en esto de mayores y que el resto de la población tenga comida digna y de calidad", han añadido. 

Además, se han mostrado sorprendidas y agradecidas por la respuesta. "Hemos pasado muchos nervios esta semana pensando que íbamos a estar solas pero al final hemos tenido una acogida magnífica y estamos súper emocionadas con que tanta gente se haya volcado con este propuesta", han afirmado.