Jaca y Sabiñánigo continúan limpiando calles de nieve y hielo 20 días después de las nevadas

Las bajas temperaturas que se registraron tras las nevadas ha hecho muy complicada la retirada de la nieve que posteriormente se convirtió en hielo.

Nieve en Jaca.
Nieve en Jaca.
Laura Zamboraín

Localidades como Jaca y Sabiñánigo continúan limpiando calles de nieve y hielo veinte días después del paso de las borrascas Fien y Gerard el pasado mes de enero. Y es que las bajas temperaturas que se registraron tras las nevadas ha hecho muy complicada la retirada de la nieve que posteriormente se convirtió en hielo. Ese ha sido el principal problema. Igualmente, este martes, las precipitaciones de nieve han regresado a ambas comarcas Pirenaicas, aunque sin llegar casi a cuajar en las calles. Tanto en Jaca como en Sabiñánigo comenzaba a nevar sobre las 11.00, sin parar hasta aproximadamente las 14.00. A la nieve le ha seguido la lluvia.

En el caso de la nieve acumulada, ambas borrascas dejaron en enero mayores espesores que la famosa Filomena. “Si para Filomena cayeron 20 litros por metro cuadrado, en enero se registraron 60 metros, agravado por el hecho de que inmediatamente bajaron las temperaturas y todo se congeló”, recuerda la alcaldesa de Sabiñánigo Berta Fernández. De esta manera, ha sido imposible de que forma natural la nieve se fuera deshaciendo. Por lo que el trabajo de los operarios municipales ha sido más complicado y continúan picando hielo y recogiéndolo con máquinas y camiones para dejar las calles lo más transitables posibles y las calzadas despejadas. El principal problema han sido las temperaturas, ya que la nieve se fundía por la sal, pero se volvía a congelar ya que las temperaturas han rondado en Sabiñánigo los 10 grados bajo cero de forma casi ininterrumpida. “Eso ha hecho que se convierta en bloques y ha sido necesario sacarlo a base de pico, pala y maquinaria especializada”, asegura Fernández.

En la capital serrablesa, las avenidas del Ejercito y Huesca se limpiaron al completo en primer lugar, y se continuó por la calle Serrablo, donde hubo que cortar el tráfico para despejar las zonas de aparcamientos. Esta semana se ha seguido por la calle Coli Escalona y los patios de los colegios. “Hay previstas algunas zonas más, a las que esperamos ir llegando poco a poco”, señala la alcaldesa. ¿Y qué se hace con tanta nieve? Se traslada con camiones a diferentes zonas de acopio. En Sabiñánigo en los laterales del boulevard, el polígono Sepes y la zona del matadero. Ahí se acumulan montones y montones de nieve. Y en Jaca en la zona de aparcamiento del campo municipal de fútbol o en el aparcamiento de la avenida perimetral.

De la misma manera, en la capital jacetana se siguen realizando labores de limpieza y cada día son varios los camiones que se llenan de nieve procedente de diferentes calles. En este caso, los operarios municipales también tienen que picar el hielo porque las temperaturas tras las nevadas fueron igualmente gélidas.

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