El Hospital Militar crea una nueva planta para acoger hasta 30 heridos de la guerra de Ucrania

El Hospital Militar de Zaragoza va a crear una nueva planta hospitalaria logística que incluirá hasta 30 camas destinadas a los heridos de la guerra de Ucrania y a atender a otros militares que puedan ser víctimas de accidentes bien en la Base Aérea de Zaragoza y el campo de maniobras de San Gregorio.

Está previsto que la puesta en marcha de la planta situada en el segundo piso y en la zona sur empiece el próximo 16 de octubre, después de las Fiestas del Pilar. Próximamente se va a proceder al traslado a la zona nueva de 18 de los 19 militares ucranianos heridos que hay ahora en la capital aragonesa (uno está destinado en un piso para ir a rehabilitación).

Fuentes militares señalaron que esta zona ya se utilizó de manera especial para los afectados de la pandemia (algo más de un año desde marzo de 2020) y ahora se ha preparado para que sean destinados los heridos de guerra ucranianos. 

José Miguel Marco

El Ministerio de Defensa tiene previsto ampliar los heridos ucranianos en los próximos días con diez o doce nuevos afectados, que se sumarán a las nuevas habitaciones, y otros cinco curados serían enviados a su país en el mismo avión A400M del Ala 31 que suelen trasladarlos desde la Base Aérea de Zaragoza y otra que utilizan en Polonia, el país vecino de Ucrania.

El futuro gimnasio en dos habitaciones 

De hecho, dos habitaciones se están preparando para que se dediquen al futuro gimnasio de las víctimas de la invasión de Rusia desde el 24 de febrero de 2022 y puedan realizar allí sus ejercicios, tal como hacían hasta ahora en las dependencias que hay para todos los ingresados en el centro hospitalario.

Oliver Duch

Está previsto que en los próximos días llegue también nuevo personal sanitario de Ucrania para formarse en el Hospital Militar de Zaragoza. De esta manera, volverían a recuperar esa colaboración que permitió hace meses adquirir conocimientos valiosos por parte de varios fisioterapeutas y enfermeras ucranianos. Sobre todo su necesidad es la especialidad de aprender a colocar prótesis mioeléctricas a los heridos de la guerra, que suelen llegar sin brazos o piernas desde su país.

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El despliegue que hace Defensa en el centro hospitalario de la capital aragonesa supone también una ampliación temporal del personal con carácter temporal con 75 trabajadores, entre los que destacan  enfermeros, celadores, fisioterpeutas, rehabilitadoras, terapeutas y médicos (internistas, neumólogos y otorrinos).

Fuentes militares detallaron que el Hospital General de la Defensa se ha especializado en el tratamiento de los militares heridos de guerra en Ucrania que suelen pasar por varios especialistas habitualmente por sus daños en brazos, piernas y espalda, así como el oído, los ojos y la cara, como consecuencia de sufrir los ataques con bombas.

Entre los militares ingresados ahora hay uno ciego que está aprendiendo a utilizar un bastón, gracias a la colaboración de la organización ONCE con el Hospital Militar para ayudarle a su rehabilitación a través de otra persona que no tiene vista.

Fuentes militares detallan que buena parte de los heridos que atienden suelen venir con restos de metralla y partes del cuerpo afectadas. Además, necesitan tratamientos de maxilofacial frente a las lesiones plásticas, y muchos días de rehabilitación para volver a andar de manera habitual.

Hasta ahora, España ya ha atendido a 72 militares heridos en  Ucrania y con los próximos envíos que se realizará a mediados de octubre podrían alcanzar los 82. Pero con la ampliación de la zona donde se instalen se abre la posibilidad de llegar hasta el límite de una treintena de atendidos en la capital aragonesa.

Por otro lado, el Ministerio de Defensa tiene previsto instalar una resonancia magnética en el Hospital Militar el próximo mes de enero de 2024, con la que ayudarán a rebajar la presión de los usuarios de este aparato en el Hospital Miguel Servet. Este nuevo aparato sirve a los médicos con este método de diagnóstico de imágenes detallados de los órganos y tejidos a los largo del cuerpo sin la necesidad de usar rayos X o radiación ionizante.