La Junta Electoral envía a la Fiscalía a 21 miembros de mesa que se ausentaron el 28-M
Presidentes y vocales se enfrentan a cuantiosas sanciones por eludir sin justificación su obligada presencia en las urnas.
Eludir su responsabilidad en la pasadas elecciones del 28 de mayo le puede salir muy caro a 21 vecinos de la capital aragonesa. La Junta Electoral de Zaragoza ha remitido a la Fiscalía 21 expedientes sobre personas que habían sido designados presidentes o vocales de mesa y no cumplieron con sus obligaciones. Se enfrentan a una pena de prisión de tres meses a un año -aunque nunca se llega a este extremo- o una multa económica de 6 a 24 meses. Se trata de un serio aviso de cara a los comicios del próximo 23 de julio, en los que el periodo estival puede incitar a más de uno a hacer caso omiso a sus responsabilidades.
Los delitos por abandono o incumplimiento en las mesas electorales están regulados en el artículo 143 de la Ley Electoral, que establece que "el presidente y los vocales de las mesas electorales así como sus respectivos suplentes que dejen de concurrir o desempeñar sus funciones, las abandonen sin causa legítima o incumplan sin causa justificada las obligaciones de excusa o aviso previo que les impone esta Ley, incurrirán en la pena de prisión de tres meses a un año o multa de seis a veinticuatro meses".
Las condiciones
El número de días de multa lo fija el juez en función de las circunstancias de cada caso, pues no es lo mismo quien se ha ausentado sin cargas familiares, quien ha aparecido ebrio -algo más habitual de lo que parece- o el que se ha marchado a mitad de la jornada. Tras determinar el número de jornadas de multa, se establece la cuantía, que oscila entre 2 y 400 euros por día, en función de la capacidad económica de la persona sancionada.
Para no llegar a estos extremos, existen numerosos motivos de exclusión que evitan tener que participar en una mesa electoral, pero hay que cumplir una serie de requisitos y la ley hila muy fino para impedir los abusos. Por ejemplo, están exentas aquellas personas que ya han formado parte de una mesa electoral en tres ocasiones en el pasado; las embarazadas de riesgo o de más de seis meses; los mayores de 65 años de edad; tener una discapacidad o estar de baja; o quienes tienen a alguien a su cuidado, entre otros.
Además, la Junta Electoral Central ha abierto la puerta a que las personas que tuvieran contratadas sus vacaciones antes del pasado 30 de mayo puedan librarse de formar parte de una mesa en los comicios del 23 de julio si demuestran que su cancelación les supone un "perjuicio económico o trastorno grave". No obstante, esta exención está sujeta a que esté garantizada la composición de la mesa, debido a lo extraordinario de esta convocatoria con las urnas.
Esto hará que sea más difícil que se acepte la excusa en las localidades más pequeñas, donde es más complicado encontrar sustitutos.
Sin ir más lejos, el 28-M se dio la circunstancia de que 15 de los 16 designados para un mesa electoral en Garrapinillos lograron ser excusados de su obligación por alguna razón. Por ello, la Junta Electoral se vio obligada a realizar un nuevo sorteo.
