Palcos VIP, 'videowall' con imágenes en vivo y tecnología punta: estos son los requisitos de la nueva Romareda

Los pliegos del futuro campo de fútbol abren la opción de que el estadio integre tanto los usos deportivos como los 20.500 metros cuadrados de tiendas y oficinas.

Interior del campo de fútbol de La Romareda, con el viejo marcador al fondo.
Interior del campo de fútbol de La Romareda, con el viejo marcador al fondo.
Guillermo Mestre

Tras la licitación de la operación el pasado viernes, la nueva Romareda inicia su cuenta atrás. Y a la espera de que se conozcan los primeros bocetos del anteproyecto (el Real Zaragoza ya se lo ha encargado al arquitecto de San Mamés, César Azcárate), los pliegos de condiciones concretan los requisitos de la infraestructura.

Entre lo más destacado, el concurso abre la opción de que el modelo de explotación no descanse sobre torres y edificios complementarios, como ocurría en el proyecto de Carlos Lamela de 2005, sino que se genere un único volumen arquitectónico con todos los usos, como en la mayoría de los estadios modernos.

Aunque los pliegos dejan margen de maniobra a los arquitectos que elaboren el proyecto, el programa de necesidades fija los mínimos que deberá cumplir el nuevo campo. Por ejemplo aspectos ya sabidos, como que deberá tener 42.500 espectadores, con el reto de cumplir con el mínimo de 40.000 establecidos por la FIFApara ser subsede de un Mundial, aspiración que tiene Zaragoza de cara al de 2030 que quiere organizar España, Portugal y Marruecos.

Estadio "de última generación"

Los pliegos, que se rigen por los criterios de la FIFA, apuntan que debe utilizarse "los 365 días" y guiarse por los criterios de los estadios "de última generación". Y para eso es básico reunir en un único edificio todos los usos. "El proyecto podrá tener en consideración la integración de los usos de terciario y terciario deportivo, no solo en el aspecto funcional, sino también en el arquitectónico y de imagen final de la nueva Romareda", dicen. El estadio prevé 20.500 m2 de tiendas y oficinas.

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Recreación del proyecto de reforma de La Romareda diseñado por Carlos Lamela en 2005. Los usos terciarios estaban en el edificio terciario del fondo.
Estudio Carlos Lamela

Además de exigir la creación de un graderío dividido en sectores para adaptarse a los diferentes tipos de entrada, los pliegos prevén zonas de ‘hospitality’, es decir, palcos que se puedan alquilar a empresas y particulares y que puedan contar con servicios complementarios. Estos espacios incluyen desde las salas, palcos VIP, zona del servicio de escoltas, guardarropías o incluso cocinas.

Junto a las zonas de prensa, vestuarios, salas de control antidopaje y médicas y área de seguridad para controlar todos los aspectos del espectáculo futbolístico, los pliegos requieren incluir la última tecnología en materia de telecomunicaciones. La nueva Romareda, por ejemplo, tendrá que tener un sistema automático de cambio de fuente energética para la iluminación y que garantice la misma iluminación en todo momento.

Nueva pantalla

El vetusto marcador de la actual Romareda dejará de existir para dejar paso a un modelo ‘videowall’, con una pantalla gigante o dos de menor tamaño, con capacidad de incorporar imágenes en vivo, como los estadios modernos. Por supuesto tendrá que tener sistemas electrónicos de control de accesos y de identificación de cada una de las localidades. Los pliegos establecen la exigencia de crear las zonas de circulación para desplazarse por todo el campo, accesos y espacios de evacuación.

Imagen del viejo marcador de La Romareda, que será sustituido por un moderno 'videowall' con imágenes en vivo.
Imagen del viejo marcador de La Romareda, que será sustituido por un moderno 'videowall' con imágenes en vivo.
Toni Galán

El campo deberá disponer de zona de ceremonias, salas de reuniones, almacenes, espacio para el personal de ‘hospitality’ y aparcamiento para la organización.Hay apartados referidos a los recursos de seguridad del estadio o a los medios de comunicación, desde la zona mixta, la tribuna de prensa, las posiciones de los fotógrafos o la sala de conferencias.

Capítulo especial merece la televisión, determinante en la industria del fútbol moderno. Se concretan posiciones de cámara, para entrevistas, espacio en el terreno de juego y otros detalles técnicos con los que deberá contar la infraestructura deportiva. Todo el espacio de las televisiones estará integrado en el estadio, lo que garantizará el máximo aforo en grandes acontecimientos que requieran mucha infraestructura para los medios.

El campo deberá contar con ascensores para el público y para los servicios independientes, lo que da a entender que los licitadores podrían plantear nuevos accesos al estadio hasta un parquin subterráneo. Como curiosidad, se prevén salas para niños que acompañan a los jugadores en el inicio de los partidos, para las mascotas o un espacio para los jóvenes de apoyo. Estas zonas tienen que ajustarse a la normativa que las instituciones deportivas fijen para el Mundial 2030 cuando se redacte el proyecto de ejecución.

El concejal de Urbanismo, Víctor Serrano, está convencido de que "sin campo no hay Mundial". "Es nuestra última oportunidad. Y es el mejor proyecto de campo que se ha presentado en la ciudad", declaró. Recordó que el viernes se anunció la remodelación de La Rosaleda de Málaga, también de cara al Mundial. 

"Entre las ciudades que tenemos que construir un campo o remodelar el existente, el más ambicioso es el de La Romareda", afirmó Serrano, que concluyó, en referencia al campo de Bilbao: "Será un estadio mejor que San Mamés".

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