sucesos 

"Si la meteorología sigue así, los incendios se extenderán a toda España"

El capitán Gustavo Abad, de la Unidad Militar de Emergencias de la Base de Zaragoza, destaca que la sequía puede adelantar la campaña antiincendios.

Efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) de la Base de Zaragoza desplegados en el reciente incendio de Castellón y Teruel.
Efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) de la Base de Zaragoza desplegados en el reciente incendio de Castellón y Teruel.
UME Aragón

El fuego se ha cebado este mes de marzo en las provincias de Teruel y Castellón, con un virulencia insólita para la época y un balance de más de 4.000 hectáreas quemdas, 800 de ellas en Teruel. En estos momentos, en Asturias y Galicia también se enfrentan a numerosos fuegos.

El capitán Gustavo Abad, responsable del grupo táctico de la Unidad Militar de Emergencia (UME), cuenta a HERALDO que el despliegue de 96 efectivos del batallón destinado en la Base de Zaragoza en pleno mes de marzo para los incendios que han conectado a las provincias de Castellón y Teruel es algo “inédito” para ellos porque las campañas antiincendios suelen ser de junio a septiembre. Abad prevé que el “cambio climático” va a provocar un año complicado.

No solo se ha registrado este incendio que ha afectado a unas 4.600 hectáreas durante una semana, sino que ahora se han declarado otros dos fuegos en Asturias y Cantabria, contra los que se han trasladado efectivos de la UME del batallón destinado en León.

En los meses de marzo solía llover siempre y no había combustible disponible para el fuego, pero este año el problema de estrés hídrico del año 2022 persiste en toda España. Hemos pasado una primavera sin agua y esta es la consecuencia”, lamenta el capitán Abad, un oficial zaragozano de 37 años que ha dirigido al centenar de militares de la UME donde ingresó en 2015. “El combustible está disponible y puede haber más incendios. Es obvio que hay un cambio climático porque no llueve cuando debería”.

Parte del grupo táctico de la UME se dedicó a sofocar el incendio, otros a prestar asistencia a los vecinos de las dos provincias y hubo un tercer grupo que se encargó de la maquinaria pesada. Se enfrentaban a una zona poco transitable, un terreno abrupto por los barrancos, que ha generado muchas dificultades al tráfico por tierra de todos los equipos antiincendios.

Los militares de la UME colaboraron con efectivos de la Generalitat Valenciana, la DGA, la Diputación Provincial de Castellón y Teruel, así como con unidades de brigadas forestales provinciales y dependientes del Miteco (Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico).

Balance positivo de la coordinación

La conexión de todas las unidades de distintas procedencias lleva al oficial a hacer un balance positivo respecto a la coordinación. “Los incendios no miran las fronteras de las provincias, pero obligan a tener que realizar la coordinación con muchos efectivos. Este caso ha sido un ejemplo del que se puede aprender”, reconoce el capitán Abad.

Aun así, hay una lección aprendida de este incendio: si el tiempo sigue así, habrá que modificar los efectivos para afrontar los incendios. El oficial recuerda que actuaron en dos incendios ocurridos en Vera (Navarra) en febrero o en Valderrobres (Teruel) en diciembre hace unos años, pero “eran muy puntuales”.

Si la  meteorología sigue así (sin lluvias primaverales), los incendios se extenderán a toda España”, estima el capitán de la UME, aún bajo el clima veraniego (rondan los 30 grados en marzo) que se está registrando estas semanas.

De una emergencia a la protección civil 

Con todo, la cooordinación de este operativo, según el oficial Abad, ha permitido “actuar contra una emergencia por un desastre natural”, como es un incendio de 4.600 hectáreas (en la primera medición), y  proceder a “la evacuación” de los 2.000 vecinos de los municipios afectados como una actuación de “protección civil” para saber dónde  refugiarlos, atenderlos y darles de comer.

Efectivos de la UME de la Base de Zaragoza actuan en el incendio declarado en Castelló y Teruel la semana pasada.
Efectivos de la UME de la Base de Zaragoza actuan en el incendio declarado en Castelló y Teruel la semana pasada.
UME Aragón

En este incendio, el responsable de la UME de la Base de Zaragoza reconoce que se han enfrentado a cuatro elementos difíciles de afrontar: la meteorología con las altas temperaturas, el viento fuerte ante una humedad relativa baja, la topografía de la zona llena de barrancos, y sin la ausencia de lluvia.

El capitán Abad recuerda que la UME mantiene un equipo de guardia del batallón integrado por cuatro personas para las tareas de reconocimiento y de 16 a 18 militares dispuestos para la intervención que pueden salir en apenas 15 minutos desde que reciben el aviso porque se encuentran en las unidades de la Base aérea de Zaragoza.

Al tener la mayor parte de sus intervenciones en verano, los casi 500 efectivos de esta Unidad Militar de Emegencias solo pueden coger diez días de vacaciones entre julio y septiembre. Si los fuegos se amplían a la primavera, con la falta de lluvias, igual tienen que modificar también estas medidas y ampliar esos meses no vacacionales.

Efectivos de la UME de la Base de Zaragoza intervienen en el incendio de Castellón y Teruel declarado la semana pasada.
Efectivos de la UME de la Base de Zaragoza intervienen en el incendio de Castellón y Teruel declarado la semana pasada.
UME Aragón

El pasado lunes, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, visitó la zona del incendio y recordó una vez más el peligro de la “emergencia climática”. 

La Guardia Civil ha abierto la investigación sobre cuatro personas en Castellón como presuntos autores del incendio que se declaró y ha arrasado la zona fronteriza con Teruel. 

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión