Los dueños de Paymar y Forestalia compran los locales y oficinas de Puerta Cinegia
La operación afecta al 29% del complejo, que estaba en manos de un fondo inglés tras la quiebra de Ordisa. Round Shield también vende el parquin a Indigo y el edificio frente a la Audiencia al promotor eólico.
Los propietarios de Electrodomésticos Paymar, Pedro José Giménez Lombar, y de la promotora de energías renovables Forestalia, Fernando Samper, han adquirido los locales, el centro de negocios y parte de las oficinas de Puerta Cinegia. La millonaria operación afecta a casi 9.000 metros cuadrados del complejo que levantó la constructora aragonesa Ortiz Dieste (Ordisa) hace dos décadas y que estaba en manos de un fondo inglés, Round Shield, tras su quiebra.
Fuentes conocedoras de la operación han indicado a este diario que los contratos se han cerrado en las últimas semanas y han supuesto también la venta del aparcamiento. En este caso, su titularidad es de la multinacional francesa Indigo desde finales del año pasado. En concreto, posee y gestiona en rotación 200 de las 300 plazas repartidas por las cinco plantas del garaje ya denominado como plaza de España.
La compañía conocía las instalaciones, dado que tenía contratada con anterioridad la gestión remota por las noches y en los momentos en los que no había personal. Indigo explota en la ciudad otros diez aparcamientos, siete de ellos por concesión municipal, dos que tiene alquilados y otro que ya ostentaba en propiedad, el de San Ignacio de Loyola, junto a la sede de Ibercaja. Igualmente, está al frente de la zona azul de la ciudad.
El acuerdo de mayor cuantía que ha cerrado Round Shield sobre Puerta Cinegia corresponde a los locales, a la zona de gastronomía y al centro de negocios, que ha adquirido Pedro José Giménez Lombar. En total, 7.062 metros cuadrados repartidos entre la planta calle, la primera y segunda del complejo. Los cambios en la propiedad no han repercutido en los inquilinos y en el modelo de negocio.
Este empresario zaragozano no solo es conocido por ser el propietario de Electrodomésticos Paymar, sino por ser uno de los principales actores inmobiliarios del Casco Histórico tras haber intervenido, directa o indirectamente, en la recuperación de un centenar de edificios a lo largo de su carrera.
Mientras tanto, Fernando Samper se ha hecho con la propiedad de otros 1.642 metros cuadrados de oficinas. La mayor parte de la superficie corresponde con las instalaciones que ocupaba en alquiler su propia compañía promotora de renovables, Forestalia.
El complejo, de 30.000 metros cuadrados, ocupa la manzana comprendida entre la plaza de España y las calles Cuatro de Agosto y Estébanes. Inaugurado a finales de 2004, cuenta con 50 establecimientos, 40 despachos y 39 viviendas. El edificio, diseñado por el arquitecto Daniel Olano, costó 65 millones y su construcción se prolongó 15 años.
Del mismo modo, Fernando Samper ha comprado otro de los activos procedentes de Patrinza, el edificio y los locales de César Augusto, 44, situado en la esquina del Coso que también tiene fachada frente a la Audiencia Provincial. La superficie alcanza 1.750 de los 2.680 m2 de la superficie construida.
Una primera ronda hace un año
Las citadas fuentes conocedoras de la operación señalan que la consultora Ernst & Young sacó hace ahora un año al mercado los activos en rentabilidad de la patrimonial de Ordisa, Patrinza, por los que se interesaron varios conocidos inversores de la capital aragonesa. Sin embargo, no hubo acuerdo sobre el precio al incluir todo el paquete de propiedades inmobiliarias y finalmente, en diciembre del año pasado, se lo quedó el citado fondo inglés por algo menos de 60 millones de euros. «Era una suma importante para tratarse de Zaragoza, ya que los fondos internacionales se interesan fundamentalmente por activos de Madrid o Barcelona», indicaron.
En el caso de Round Shield, ya conocía la capital aragonesa y con antelación, a mediados de 2011 ya había adquirido Almaebro por otra suma millonaria. Esto le permitió vender a la promotora Aedas Homes hace más de año y medio una de sus propiedades, el paquete de siete parcelas para 336 pisos libres ubicadas entre la prolongación de Tenor Fleta, el tercer cinturón, el Canal Imperial y el colegio de Santa Ana. En este caso, sí trascendió el importe de la transacción, en torno a los 22 millones, que convierte Aedas en el propietario mayoritario de este ámbito pendiente de desarrollo. Allí está previsto edificar cerca de un millar de viviendas libres y protegidas distribuidas en sus más de 16 hectáreas de superficie.
Round Shield no sacado a la venta todos los activos de Patrinza y, de hecho, se ha quedado con el de mayor valor económico, el paquete de aproximadamente 160 pisos con garajes que construyó en su momento Ordisa en el barrio del Actur. Su pretensión es rentabilizarlos mediante su arrendamiento.
