Día de la niña y la mujer en la ciencia
Las científicas aragonesas piden mejores condiciones para "poder conciliar"
Luchar contra los roles de género, implantar acciones de discriminación positiva y rescatar referentes, son algunas claves para acabar con las brechas en la ciencia, según las expertas que han participado en la jornada 'Mujer de Ciencia'.
En algo están de acuerdo las científicas aragonesas. Se han hecho grandes avances en los últimos años, y la brecha de género se ha visto reducida. Las investigadoras, no obstante, siguen teniendo un "techo de cristal", la conciliación para compaginar el trabajo con su vida cotidiana. Por eso, han pedido "mejores condiciones" para evitar esta situación en la jornada 'Mujeres de Ciencia', organizada por el Gobierno de Aragón, cuyo objetivo es fomentar la figura y la labor de estas profesionales entre los escolares. Las expertas también han asegurado que "luchar contra los roles de género, implantar acciones de discriminación positiva y rescatar referentes", son las claves para acabar con las brechas. Esta actividad se celebra en el marco del Día de la Niña y la Mujer en la Ciencia del próximo sábado, 11 de febrero.
La mesa redonda, que ha tenido lugar en el Espacio Joven de Ibercaja, ha contado con la participación de Rosa Bolea, vicerrectora de la Universidad de Zaragoza; Olga Villagrasa, profesora de la rama científica del IES El Portillo y presidenta de Educación del Colegio Profesional de Biólogos de Aragón; Helena García, investigadora; y Marina Gimeno, estudiante de bachillerato. Todas ellas han contado su experiencia como científicas, mientras que la joven ha aportado su visión y sus ganas de adentrarse el mundo Steam -Ciencia, Tecnología, Ingeniería, Arte y Matemáticas-. Todas han coincidido en que uno de los principales problemas es la conciliación.
Olga Villagrasa escogió las ciencias cuando entró en bachillerato porque le volvían "loca". Se decantó por la biología y, cuando quería hacer la tesis, descubrió la "cruda realidad". "Las condiciones del personal investigador y doctorandos son terriblemente malas. Iba a cumplir 30 años sin tener una situación económica para poder tener familia, que era lo que yo quería. Decliné la oferta de hacer la tesina para buscarme las lentejas", ha detallado Villagrasa. Ella no ha sentido que "por ser mujer no haya tenido más oportunidades", pero su techo de cristal ha estado en la "conciliación familiar".
Por su parte, la investigadora de 28 años Helena García ha mostrado su preocupación por los datos "que muestran que al ir avanzando en la carrera investigadora hay menos mujeres en proporción". García ha reflejado que "el sistema académico dificulta la conciliación con la vida en general", por lo que se debe hacer un sistema de ciencia "mucho más humano". "Se deberían establecer políticas institucionales que favorezcan la conciliación", ha añadido.
Además, Villagrasa ha explicado que sus alumnos de bachillerato han elaborado un formulario respecto a sus posibilidades dentro de las carreras denominadas Steam. "No ponen en sus listas de oportunidades todas las que quieren. Porque predomina el sexo contrario, contestaban", ha detallado esta docente. Los estudiantes decidieron recoger varios números publicados por investigación y ciencia con una horquilla amplia de tiempo y averiguado investigadores e investigadoras publicaban. "Empezaban con un 100% masculinos, y ahora rondamos el 50%", ha añadido. Por lo tanto, ha emplazado a "seguir trabajando", porque "lo que se ha estado haciendo hasta ahora para solucionar la brecha de género está funcionando".
Mientras, la alumna Marina Gimeno ha explicado que en los últimos cursos de la ESO ha tenido la suerte de tener muchas profesoras científicas y que sueña con ser biomédica, aunque es consciente de que va a ser "un camino complicado". Y ha contado cómo en su instituto están trabajando y estudiando el porqué las niñas, todavía hoy, "no se ven estudiando ciencias".
La vicerrectora de la Universidad de Zaragoza ha aprovechado, además, para promocionar la campaña 'Soy científica. Vivo en tu barrio', una exposición exhibida en Santa Engracia donde se muestran referentes cercanos para celebrar el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia. Ha relatado su experiencia como científica, ya que es catedrática de sanidad animal, y ha adelantado que a nivel institucional se está haciendo un estudio "que está a punto de finalizar" y que refleja qué porcentaje de mujeres lideran proyectos, grupos de investigación, etcétera, que se dará a conocer muy pronto.
Además, ha recordado cómo en sus inicios el 95% de profesores de su departamento en la universidad eran varones y ha lamentado que le faltaron referentes de mujeres científicas. "Por eso es muy importante la labor de las mujeres profesoras en las enseñanzas medias. Mi espejo eran las profesoras de Ciencias del Instituto", ha confesado.
Roles de género
En este sentido, la consejera Maru Díaz, encargada de cerrar la mesa redonda, ha arremetido contra "los roles de género y los constructos sociales que condicionan las vidas de las niñas desde bien pequeñas" y ha abogado por "seguir caminando todos juntos hacia el acceso y la participación plena y equitativa en la ciencia para las mujeres y las niñas, ya que ningún país puede permitirse perder la mitad del talento". "Ya no porque no sea justo, sino porque además es perjudicial para el progreso económico y social", ha defendido.
