Ricardo Mairal: "Queremos usar la inteligencia artificial para el aprendizaje"

El rector de la UNED, reelegido por otros 4 años y natural de Huesca, pide al Gobierno que garantice la financiación de una institución clave para la lucha contra la despoblación.

Ricardo Mairal, rector de la UNED, en la sede central de la institución en Madrid.
Ricardo Mairal, rector de la UNED, en la sede central de la institución en Madrid.
Enrique Cidoncha

La UNED cumple medio siglo. ¿Mantiene los mismos objetivos que llevaron a su fundación?

Los objetivos se han adaptado a una sociedad en evolución. Pero esa función social sigue presente. Formamos al 40% de los estudiantes con discapacidad del país, a 1.100 reclusos, a las fuerzas armadas destinadas en misiones, a los expatriados...

¿Y cuáles se han incorporado?

La internacionalización es clave, al igual que la sostenibilidad, que no estaban en la agenda en su fundación. Se han incorporado la ecología, la igualdad de género y una investigación adaptada a los grandes desafíos, que ahora son muy diferentes, como las humanidades digitales, las ciencias de la salud, o los cambios en la economía.

Acaba de ser reelegido por amplia mayoría. ¿Qué balance hace de estos últimos cuatro años?

Han sido muy complicados. Hemos tenido que tomar decisiones que muchas veces no gustan o tienen un coste. Y lejos de tenerlo hemos mejorado cinco puntos con un 63% de respaldo. La gestión de la pandemia ha sido muy difícil, con el cierre de la Universidad en marzo de 2020. Nosotros celebramos todos los exámenes a la misma hora en todos los centros, eso implica que en cada convocatoria hacemos 500.000 pruebas. Hubo que desarrollar una tecnología inmediata y ahí hay que nombrar el liderazgo del centro de Barbastro.

¿Qué retos afronta para el nuevo mandato?

Vivimos un momento de incertidumbre geopolítica, energética y socioeconómica, y además hay un progreso exponencial de la digitalización, un avance en las ciencias de la salud… Desde la Universidad debemos ofrecer respuestas a estos desafíos y alinear nuestra oferta académica a lo que nos demanda el mercado. Gran parte de esa respuesta serán trabajos interdisciplinares. Además, la investigación es una de mis prioridades. Con la pandemia hemos visto que la ciencia es clave en el desarrollo de las vacunas. Ante la incertidumbre hay que buscar amparo en la ciencia, es la esperanza racional para un futuro mejor.

La UNED tiene una vocación internacionalista. ¿Abrirá más centros en el exterior?

Estamos en 22 países pero quiero reforzar esa presencia internacional, clave para que las instituciones crezcan y prosperen. Estamos en la época de las alianzas y nuestra proyección es fundamental para potenciar programas de intercambio y de investigación.

Si algo caracteriza a la UNED es su particular método semipresencial, muy vinculado a las nuevas tecnologías. ¿Cuál será la próxima evolución?

Siempre hemos combinado la presencialidad con los medios tecnológicos. En el 72 eran la televisión y la radio, mediante entrevistas a intelectuales que eran un complemento a los manuales. Con internet se creó el primer sistema de videoconferencias. Y hoy mi obsesión es el uso de la inteligencia artificial para el desarrollo de modelos de aprendizaje personalizados. Queremos utilizar las interacciones de los estudiantes en el curso virtual, de forma que cuando se percibe que hay una duda recurrente se le pueda hacer recomendaciones. Pero también para la propia gestión de la universidad, la administración electrónica o el uso inteligente de nuestros edificios. Hemos puesto en marcha una oficina del dato.

¿Qué papel juega la UNED en la lucha contra la despoblación?

Uno muy importante. Tenemos 61 centros y 200 aulas por el territorio que permiten que muchas personas accedan a una formación universitaria. Es el mejor ejemplo de la democratización de la enseñanza superior de este país.

¿Percibe que la institución tiene el mismo prestigio que otras universidades presenciales?

La UNED_tiene un gran prestigio gracias a la disciplina de estudio de sus alumnos, que tienen que llegar a casa después de trabajar y ponerse a estudiar. Son ejemplo de esfuerzo, perseverancia y afán de superación. Eso se traduce en que luego ocupan los primeros puestos en los concursos más competitivos y exigentes de la Administración.

¿Están logrando atraer a nuevos perfiles?

Sí, tenemos gente más joven y se han abierto nuevas titulaciones. Siempre hay algunas más populares, ahora son Psicología, Derecho, Educación infantil e Ingeniería de la Energía. También tenemos mucha demanda en másteres que desgraciadamente no podemos atender. Algunos con 690 plazas reciben 10.000 solicitudes.

¿Qué espera de la Ley Orgánica del Sistema Universitario?

Ante todo regularizar la financiación. Que se equipare al 1% del PIB, atender las condiciones especiales como la presencia en el territorio y una tercera vía condicionada al cumplimiento de los objetivos.

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