hostelería
Los bares y restaurantes podrán abrir hasta las 2.00 en Nochevieja en Aragón
El Gobierno de Aragón ha anunciado esta excepción al cierre a medianoche, tras las quejas planteadas por los hosteleros.
Los bares y restaurantes de Aragón podrán abrir finalmente hasta las 2.00 de la madrugada el día de Nochevieja. Se trata de una excepción que ha anunciado este mediodía el Gobierno aragonés, dado que había comunicado el cierre a las 00.00 a partir del miércoles. De esta forma, ha tenido en cuenta la petición del sector hostelero de poder ampliar el horario esa noche para que los clientes pudieran cenar y tomarse las uvas en el establecimiento. Fernando Martín, de Horeca Zaragoza, considera que la ampliación de horarios es "una buena noticia" y ha instado a "todas las personas que habían anulado sus reservas para Nochevieja" en los restaurantes a que las recuperen, ya que "se podrán tomar las uvas y hacer una sobremesa larga".
Así, tanto los establecimientos de hostelería como de ocio nocturno de Aragón podrán abrir hasta las 2.00 del ya año nuevo. En general, desde este miércoles los bares y restaurantes deberá cerrar a las 00.00 y el ocio nocturno a las 2.00.
Serán los locales de ocio nocturno, por tanto, los principales perjudicados de las restricciones que entran en vigor esta medianoche y que se mantendrán hasta el 15 de enero porque para ellos el cierre será a las 2.00, tal y como estaba previsto..
Empresarios del ocio nocturno han participado este martes al mediodía en una protesta convocada por el sector en la que han denunciado que prevén pérdidas de hasta 2 millones de euros en Nochevieja por las restricciones sanitarias. Así, el colectivo estima que se tendrán que devolver hasta 25.000 entradas y que dejará de facturar entre 15 y 20 millones hasta el 15 de enero.
No está previsto, según ha confirmado el consejero de Hacienda, Carlos Pérez Anadón, que el Ejecutivo autonómico asuma el coste de las entradas a los cotillones que se dejarán de vender o quedarán anuladas, tal y como piden los empresarios afectados. Pérez Anadón se ha mostrado convencido de que este acuerdo "no será satisfactorio al 100%". Y ha emplazado a un nuevo paquete de ayudas, que se pretende activar a mediados de enero, para compensar las pérdidas. Sí ha recordado el consejero de Hacienda que el Gobierno central, a través de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTEs) y medidas adicionales con la Seguridad Social. ha contribuido a salvar puestos de trabajo. "De eso no se habla, pero son medidas estructurales que ya se han hecho", ha enfatizado.
El pago de las ayudas a la hostelería, tanto del plan de rescate autonómico de 50 millones como del nacional, ya ha comenzado y en los casos pendientes lo hará antes del lunes, según han explicado. El vicepresidente de la DGA, Arturo Aliaga, ha repasado las subvenciones concedidas hasta ahora y ha desatacado el trabajo administrativo de la consejería de Industria donde se han tramitado 15.000 expedientes.
Gobierno de Aragón y representantes de la hostelería han tratado de limar asperezas a través de una reunión, solicitada por Aurelio López de Hita, de Cepyme Aragón, en la que han participado el vicepresidente del Gobierno de Aragón y consejero de Industria y Turismo, Arturo Aliaga, y el de Hacienda, Carlos Pérez Anadón, y los representantes de Horeca en Zaragoza, Huesca y Teruel, Fernando Martín, Carmelo Bosque y Roche Murciano.
Fernando Martín ha insistido en la compleja situación que atraviesa el sector, y ha insistido en que la hostelería "no es el principal foco de contagio". Respecto al ocio nocturno, ha reconocido que es el más perjudicado al haber permanecido 450 días cerrado. Ha insistido, además, que exigirán al Gobierno de Aragón que "cada vez que adopte medidas sanitarias vayan ligadas con medidas decompensación con el sector".
Mientras tanto, la expansión de los contagios no para: en Aragón se han registrado por primera vez más de 3.000 contagios en un solo día, según los datos facilitados este martes, un hecho que además de afectar a la atención primaria está viéndose reflejado en los ingresos hospitalarios, que han obligado a abrir media planta del hospital Miguel Servet.
