Aragón

Aragón

El Gobierno central estudiará ahora si se desdobla la N-211 o se limita a mejorar su trazado

Transportes se gastará ahora casi 800.000 euros en la licitación para analizar los 108 kilómetros de Alcolea a Monreal.

Carretera N-211.
Antonio García/Bykofoto

El Ministerio de Transportes ha decidido retomar los planes para modernizar la N-211, uno de los tres ejes viarios que comunican Teruel con Madrid y cuya transformación en vías rápidas son parte de las promesas incumplidas con Aragón en materia de infraestructuras. El estudio informativo para su conversión en autovía, la A-25, se redactó hace más de diez años, pero ahora se va a licitar de nuevo para decidir si finalmente se desdobla o solo se mejora su trazado desde Alcolea del Pilar hasta Monreal del Campo, con el consiguiente ahorro para las arcas públicas. El nuevo encargo sale a concurso por 769.626 euros.

El adjudicatario deberá analizar "distintas alternativas de mejora del corredor" que conecta Guadalajara y Teruel a lo largo de los 108 kilómetros de este itinerario. Según informó este lunes el Ministerio, deberá plantear la construcción de una autovía de nuevo trazado y su posible ejecución por fases, el simple acondicionamiento de la carretera o la construcción de un tercer carril para facilitar los adelantamientos con más seguridad y hacer así más fluido el tráfico.

Este encargo supone la respuesta del Gobierno de Pedro Sánchez a uno de los compromisos con Teruel Existe, el de rehacer el diseño de la A-25 para adaptarlo a las actuales especificaciones para vías rápidas. El problema es que podría ser para no acometer la autovía, que se valoró en su día en 500 millones, sino la puesta al día de la carretera, que lleva más de dos décadas con el mismo asfalto y ha superado con creces su vida útil.

El eje tiene escaso tráfico, entre 1.800 y 2.500 vehículos de promedio diario, de los cuales entre un 18% y un 22% son camiones, "con una marcada punta estacional en verano y otros periodos vacacionales".

El Ministerio de Transportes indicó igualmente que la circulación que soporta es heterogénea, ya que se producen movimientos de media y larga distancia conectando la A-2 y la A-23 junto a tráficos locales de marcado carácter agrícola dentro del corredor.

La decisión adoptada por el Gobierno demorará en todo caso la solución a la N-211, ya que el estudio informativo habrá que sacarlo a información pública y someter las soluciones a la preceptiva evaluación ambiental. En el mejor de los casos, se podría decidir qué se hace finalmente con la carretera en unos cuatro años si no se vuelve a bloquear la tramitación.

Mientras tanto, el Ministerio sigue trabajando en la mejora de la N-211 a su paso por Aragón, ya que está ejecutando la variante de Alcorisa y ha dado la orden de estudio de las de Montalbán, Mata de los Olmos y Calanda, justo en sentido contrario al tramo que se va a estudiar de nuevo.