Covid-19
Críticas a Sanidad por la gestión de los fondos React-EU
La oposición censura que los millones liberados del presupuesto vayan a la caja única de Hacienda y no a mejorar el sistema sanitario.
La oposición arremetió ayer contra la Consejería de Sanidad por la gestión de los fondos React-EU. No entienden que los 11,7 millones que se liberarán gracias al estímulo de la Unión Europea –con el que se construirán el centro de salud del barrio de Jesús y la reforma y ampliación de las urgencias del hospital San Jorge de Huesca– vayan a parar a la caja única de Hacienda y no a más inversiones en materia sanitaria.
El PP cargó en las Cortes contra la "tremenda opacidad" del Ejecutivo de Javier Lambán y censuró que el dinero vaya a un fondo común y deje con "cero euros de ganancia" al Departamento de Sanidad. En este sentido, la diputada Ana Marín pidió que las partidas "no se pierdan en cuestiones que se desconocen" y se centren en proyectos como el del centro de salud de Barbastro o las urgencias de Calatayud.
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El problema, según Susana Gaspar, de Ciudadanos, es que los React-EU van a servir únicamente "para tapar el gasto extraordinario de 2020 y cubrir proyectos de 2021 ya presupuestados". A su entender, tendrían que aprovecharse para reforzar la Atención Primaria, invertir en tecnología y prestar una mayor atención a las secuelas del virus. "Sea valiente y tenga visión de futuro. En sus manos está sentar las bases de una verdadera transformación de la sanidad", dijo.
Repollés, por contra, recalcó que estos fondos "se van a destinar a mejorar la calidad de vida de las personas" y negó que no vayan a repercutir en el sistema sanitario. "Han permitido mantener los gastos en personal y hacer una renovación tecnológica que se queda, como ha ocurrido con la compra de equipos de alto flujo o de respiradores", manifestó.
En esta línea, recordó que el Gobierno está apostando por una visión global y que en su día el resto de departamentos tuvieron que hacer un "gran esfuerzo" para dar respuesta a la crisis sanitaria.
No convenció, sin embargo, a Vox, que cargó contra un presupuesto "mal dimensionado" y avisó de la necesidad de ser "exquisitos" con los plazos de ejecución. IU, por su parte, apostó por concretar el avance hacia el nuevo modelo sanitario en cifras.