La Universidad abre más salas de estudio ante el inicio del periodo de exámenes
Las bibliotecas del campus están al 50% del aforo y, de momento, no se ha producido un incremento de la demanda.
Con los exámenes a la vuelta de la esquina y ante la reducción de aforos –limitados al 50%– que obliga la covid-19, la Universidad de Zaragoza está habilitando nuevos espacios para garantizar que buena parte de los estudiantes que así lo deseen puedan estudiar en las instalaciones del campus aragonés. Una dinámica que en tiempos de pandemia ya no es tan habitual y que provoca que todavía no haya aglomeraciones a las puertas de las bibliotecas y salas de estudio; aunque sí que se empieza a percibir un goteo constante de alumnos en busca del lugar idóneo en el que poder memorizar temarios y acabar los últimos trabajos.
"Hay menos gente en las facultades y muchos optan por estudiar en casa", reconoce Juan Guerrero, presidente del Consejo de Estudiantes de la Universidad de Zaragoza (CEUZ), quien recalca que los mayores problemas de aforo podrán darse dentro de dos semanas, cuando el 1 de junio comience el periodo de exámenes. No lo descarta tampoco la vicerrectora de Estudiantes y Empleo, Ángela Alcalá. Reconoce que "siempre faltarán plazas", a pesar de que se han duplicado los espacios habilitados en comparación con enero. "Entonces solo teníamos el edificio modular de Filosofía y Letras y la sala de Económicas. Ahora también contamos con otra en la Escuela de Ingeniería y Arquitectura y la de CAI-Universidad", puntualiza. Además, desde este viernes está a disposición de los alumnos una sala en el sótano de la Facultad de Educación (de lunes a domingo de 8.00 a 22.00).
Esta última se ha podido incorporar al haber trasladado el material que allí se guardaban. "Estamos pendientes por si, una vez acaben las clases, hubiera aglomeraciones", recalca. En Huesca está abierta todos los días de la semana la Facultad de Empresa y Gestión Pública, mientras que en Teruel se cuenta con el colegio mayor Pablo Serrano para el fin de semana.
Para contar con más espacios, desde el vicerrectorado de Estudiantes también se está en continuo contacto con los directores y decanos de las diferentes facultades por si se pudiera habilitar algún aula adicional. Por ello, recalca Guerrero, en Ciencias disponen de una sala de estudio que "nos abren en el caso de que la biblioteca esté llena". Además, les han informado sobre la posibilidad de reservar aulas: "Se hace por la web y suelen ser bastante rápidos en responder".
Adiós a los alumnos de la Evau
Una de las dificultades de contar con más salas –detalla Alcalá– es la habilitación de algunas para los exámenes universitarios –se necesitan más para garantizar la distancia– y también de la Evaluación de Acceso a la Universidad (Evau). A ello se une el control exhaustivo de los aforos, hacer conteos de cuántos entran en cada sala, corroborar que mantienen la distancia de seguridad y que no se forman grupos: "Cuesta mucho esfuerzo hacer todo este registro, pero nuestro objetivo siempre es garantizar la seguridad de los estudiantes". Tras las restricciones implantadas por la covid, se intenta asegurar que ningún alumno no universitario ocupe estas plazas, desplazando a aquellos que están preparando la Evau a bibliotecas municipales.
Estos espacios también están al 50% del aforo y entre cada uno de los usuarios siempre debe de haber 1,5 metros de distancia. El mayor dilema se produce, una vez más, los fines de semana, cuando las bibliotecas municipales solo abren durante la mañana del sábado. No obstante, desde las asociaciones de familias reconocen que la mayoría de estos jóvenes están apostando este año por estudiar en casa para evitar riesgos de contagio y también porque son conocedores de la falta de lugares disponibles por los aforos establecidos.
El colegio mayor Santa Isabel cerrará un año
El colegio mayor Santa Isabel del campus universitario de Zaragoza cerrará por obras temporalmente durante el próximo curso 2021-2022. La entidad académica prevé acometer una reforma de las instalaciones, que todavía está pendiente de un estudio de viabilidad para determinar su calado.
La vicerrectora de Estudiantes de la Universidad de Zaragoza, Ángela Alcalá, explicó que, entre otras actuaciones, se valora mejorar el sistema de calefacción del edificio y renovar las cocinas. Asimismo, señaló que ante la "dificultad" de compatibilizar los trabajos en las instalaciones con la estancia de los estudiantes y el no funcionamiento al cien por cien de algunos de los sistemas del centro, se ha optado por clausurarlo durante el curso que viene.
A estos inconvenientes se suma la necesidad de mantener las normas sanitarias contra la covid, que a buen seguro seguirán vigentes tras el verano aunque el porcentaje de población vacunada haya aumentado para entonces considerablemente.
El colegio mayor Santa Isabel, que cuenta con cerca de 200 plazas, es uno de los cuatro centros residenciales dependientes de la Universidad de Zaragoza. A él se suman en la capital aragonesa el Pedro Cerbuna; en Huesca, el Ramón Acín y en Teruel, el Pablo Serrano. Además, el campus público aragonés mantiene un convenio de colaboración con la residencia Goya del Ayuntamiento de Zaragoza y la oferta la completan diferentes centros promovidos por entidades privadas. En estos momentos en varios de ellos está finalizando el plazo de renovación de plazas.
