aniversario goya
Una jornada llena de vivas a los Reyes, ovaciones, carreras y arte en Fuendetodos
Don Felipe y doña Letizia mostraron interés sincero por todo y alabaron la obra de Goya
El 275 aniversario del nacimiento de Goya podría ser el único en celebrarse tres veces: ayer, un día antes de lo que marca el calendario, seguramente por la agenda de los Reyes; hoy, 30 de marzo, porque es la fecha real; y mañana porque es el día que figura en la placa de la casa natal del pintor. Cuando a principios del siglo XX se colocó en la fachada se esculpió por error la fecha de su bautizo y no la de nacimiento. Y como la placa ya es histórica no se ha querido corregir ni modificar.
El día amaneció radiante pero en Fuendetodos la umbría es traicionera y la Reina se sorprendió del fresco que hacía en varios puntos del recorrido. Compareció con el pelo recogido (hacía algo de viento), camiseta de rayas marineras; chaqueta blanca con volantes en las mangas, diseño de Felipe Varela que ya estrenó en 2008; zapatos con hebilla y bolso de Nina Ricci. Don Felipe vestía un traje azul de raya diplomática y una colorida corbata.
El duque de Alba, todo un Grande de España, hizo noche en el Hotel El Capricho de Goya, y por eso fue uno de los primeros en llegar al punto de encuentro. También Ignacio Suárez-Zuloaga, bisnieto del pintor que compró la casa natal en Fuendetodos.
Los Reyes, mientras, volaban en helicóptero hasta Belchite, cuyo campo de fútbol fue considerado el lugar más cercano e idóneo para aterrizar. Tras llegar a Fuendetodos, aclamados por los numerosos vecinos que les esperaban, se interesaron por todo lo que vieron, pero especialmente por el proceso de estampación de los grabados. Antes de entrar en el taller se produjo la anécdota de la jornada, cuando los monarcas se saltaron el protocolo para firmar una foto que les presentaba una niña de Muel. La foto era de la pequeña posando junto a un retrato de don Felipe, y éste se la firmó antes de pasársela a doña Letizia, que hizo lo propio.
En el Museo de Grabado los Reyes recibieron dos regalos. Por parte de la DGA, un juego de cartas de memoria que la Fundación Goya en Aragón ha realizado reproduciendo obras del pintor, y que recibieron con la intención de entregárselo a sus hijas; por parte de la Diputación de Zaragoza, un plato de cerámica de Muel decorado con un grabado de la ‘Tauromaquia’ de Goya, ‘Temeridad de Martincho en la plaza de Zaragoza’. El plato, aunque por su tamaño debería llamarse fuente, sorprendió a doña Letizia. "¿Es decorativo o se puede utilizar?", preguntó. Y se le explicó que está realizado artesanalmente con materiales naturales y que puede incluso someterse al lavavajillas.
Recibieron los Reyes dos regalos más, sendos ‘bouquet’ de flores de manos de la Asociación Goyescos. "Nos han dicho que los vestidos son muy bonitos y les han sorprendido mucho los trajes –señalaban ayer Silvia, Cristina, Yoli y David, cuatro de los goyescos–. Son muy cercanos y cariñosos".
La visita real, en imágenes
En vídeo:
