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La venta de cigarrillos en Aragón vuelve a bajar después de sufrir un repunte en 2018

En la provincia de Huesca, sin embargo, aumenta gracias al incremento del precio del tabaco en Francia.

.Cagetilla de cigarrillos

El cambio de mentalidad, las prohibiciones, el aumento del precio y las compras por internet están detrás de que la caída de las ventas de cigarrillos en Aragón. Mientras que en 2018, en la Comunidad se comercializaron más cajetillas de tabaco en comparación con el año anterior, siendo así la primera vez que subía la venta desde el comienzo de la crisis; en 2019, la venta volvió a caer, hasta las 70.676.932 cajetillas (en 2018 se vendieron 70.898.917 cajetillas, y el año anterior fueron 70.773.639). Concretamente, un 48% menos que lo que se comercializaba en 2008, según los datos del Comisionado para el Mercado de Tabacos, un organismo autónomo adscrito al ministerio de Hacienda. “En estos últimos años, la tendencia es de caída, pero más o menos se mantiene estable. Pero fue de 2009 a 2012 cuando se produjo el descenso más acusado”, explica Francisco Javier Bonafonte, presidente de la Asociación Profesional de Expendedores de Tabacos y Timbre del Estado en la provincia de Zaragoza (Asezar). “Sin embargo, a nivel de calle, en el estanco, se está notando la bajada de las ventas un montón”.

Y es que para analizar estas cifras se debe tener en cuenta que mientras en la provincia de Zaragoza y en la de Teruel las ventas continúan con el goteo de pérdidas de ventas, en la de Huesca crecen ligeramente. “No es porque en Huesca capital se compre más tabaco que en Zaragoza capital, sino por un incremento del precio del tabaco en Francia, que favorece a que los estancos de frontera estén aumentando las ventas”, añade Bonafonte.

Asimismo, se augura “un año de bajada”. “Enero siempre es un mes en el que las compras de tabaco disminuyen debido a los propósitos del año nuevo, pero, en esta ocasión, a esto se suma el hecho de que el ministerio de Sanidad esté financiando tratamientos para dejar de fumar”, asegura el presidente de Asezar. De hecho, la venta de fármacos para dejar de fumar ha aumentado casi un 300% desde el 1 de enero, cuando el Sistema Nacional de Salud comenzó a financiar dos tratamientos farmacológicos antitabáquicos: la vareniclina y el bupropion.

 “Además, a partir del 20 de mayo estará prohibida la venta de tabaco mentolado,  lo que provocará que muchas personas aprovechen esta ley europea para dejar de fumar”, indica el mismo.

“Es una realidad que ahora se fuma menos, muchas personas han dejado de fumar, pero nada tiene que ver con los cigarrillos electrónicos”, detalla Bonafonte. “Los últimos datos de las muertes asociadas con los vapeadores han provocado un retroceso de la venta. De hecho, durante este último mes yo he notado una caída de más del 50% respecto al año pasado”.

A esto hay que sumarle comercio ilícito. “Aunque en Aragón el contrabando no está afectando como en las regiones del sur de España, donde está hundiendo al sector, sí que está haciendo mucho daño la venta por internet. Una venta online, que no solo está prohibida por la ley, puesto que solo estancos y puntos de venta autorizados podemos comercializarlo, sino que además es muy difícil luchar contra ellos, ya que les cierran una web y abren otra”, asegura el presidente de Asezar.

La mejor ubicación posible

Ante esta situación, algunos propietarios de estancos buscan la fórmula para intentar minimizar gastos y aumentar sus ganancias. “Algunos compañeros han llegado a cambiarse de local para conseguir una mejor ubicación, perdiendo metros cuadrados de establecimiento, dado que ahora ya no se necesita tener tantas reservas”, explica el mismo.

“Pero cierres, por el momento no se están produciendo en las ciudades, se opta por el cambio de titularidad”, detalla. “En cambio, en los pueblos sí que nos han comentado la falta de relevo generacional. Allí no pueden venderlo. Y es que al retroceso de las ventas se une la despoblación”.