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Alumnos de Bellas Artes de Sevilla restaurarán la talla del Nazareno quemada en Tauste
Los estudiantes del grado de Conservación y Restauración de obras de arte realizarán el trabajo de manera altruista.
Los alumnos de la Facultad de Bellas Artes de Sevilla restaurarán desinteresadamente la talla del Nazareno que fue quemada por unos vándalos en la ermita del Sepulcro de Tauste. La imagen, que sufrió importantes daños, ya se encuentra en la ciudad andaluza.
La noticia del ataque a la ermita, la noche del pasado día 13 de noviembre, causó una gran inquietud popular y despertó una enorme ola de solidaridad ciudadana con los encargados de cuidar las ermitas de Tauste. De hecho, solo pasó un día hasta que el ofrecimiento de los alumnos del grado de Conservación y Restauración de Obras de Arte de la Universidad sevillana llegó a la parroquia de Tauste. No ha sido el único y han ido recibiendo desde donaciones económicas al ofrecimiento del Ayuntamiento para el pintado de la ermita o el que ha llegado desde San Sebastián de telas de terciopelo para volver a confeccionar el vestido de la talla y los cortinajes que se quemaron en el incendio. "Lo especial del caso que conocimos a través de las redes sociales hizo que nos hayamos volcado con él", señala el coordinador del grado de Conservación y Restauración, David Arquillo, quien destacó que la propuesta de trabajar sobre esta obra contó con el consenso de la comunidad educativa.
"Además de trabajar para entidades con una cierta economía, nosotros realizamos también una labor social. La imagen viene en muy malas condiciones con algunas partes que están incluso calcinadas". De hecho, la escultura podría tener afectada hasta el 80% de su superficie. "Por las estimaciones que hemos hecho los profesores, la restauración puede llevar entre dos y tres años», apunta, porque se trata de un trabajo «delicado y complejo".
Un estudio previo, que contará con la participación de docentes de diversas disciplinas determinará el estado de la escultura para realizar un diagnóstico exacto de los materiales y la alteración que han sufrido con el fuego. El uso de pruebas de radiodiagnóstico es también importante para determinar la intervención que se hará finalmente.
La parroquia envió la talla del Nazareno el pasado lunes después de embalarla cuidadosamente tras la despedida del domingo anterior por la tarde. "Celebramos en la ermita una eucaristía de desagravio-reparación por el daño moral que han hecho al quemar las imágenes y lo que representan para el pueblo de Tauste", explica el párroco, José I. Longás. A la misa asistieron integrantes de Aragón de la Orden del Santo Sepulcro de Jerusalén junto a miembros de las Cofradías de la Virgen de la Oliva y de las cofradías locales. Desde la Orden del Santo Sepulcro de Jerusalén recordaron que esta ermita "ya sufrió una profanación en 1933, cuando el templo fue incendiado y la talla del Cristo Yacente resultó quemada y destruida". Una placa recuerda ese incidente.
Del siglo XVIII
La talla puede datar del siglo XVIII y tiene un gran valor sentimental para los taustanos ya que es el Nazareno que tradicionalmente salía en las procesiones de Semana Santa. Cuando la parroquia adquirió nuevas imágenes, esta se llevó a la ermita del Santo Sepulcro donde se conservaba hasta la fecha.
La restauración, paso a paso
- Primer paso. Desembalaje. Se hizo con mucho cuidado para ver cómo se encontraba la imagen. Después se procedió a retirar las prendas que cubrían la talla.
- Segundo paso. Fotografías técnicas y estudio histórico-artístico.
- Tercer paso. Análisis de los materiales, con rayos X, radiaciones ultravioleta, infrarrojos; microscopía óptica; y pruebas de calcinación y consolidantes.
- Cuarto paso. Simulación digital del proceso acabado.
- Quinto paso. Estudio cromático, consolidación del soporte y fijación de estratos polícromos.
- Sexto paso. Reconstrucción de la capa de preparación y polícroma y protección superficial.
- Séptimo paso. Documentación fotográfica, informe final y embalaje.
