La nueva facultad de Filosofía transformará la entrada al campus

El anteproyecto de la nueva facultad de Filosofía y Letras transformará la entrada al campus de San Francisco y será sobrio, respetuoso medioambientalmente y mucho más diáfano que el actual. Los detalles de este anteproyecto han sido presentados en la facultad después de que sea ya definitiva la adjudicación del mismo a la UTE formada por Magén Arquitectos e Ingeniería Torné.

Aunque la firma con la empresa aún está pendiente, representantes de la Universidad de Zaragoza y del Gobierno de Aragón han detallado las líneas generales de una reforma que no arrancará hasta mediados del año 2018 y que contempla derribar y levantar por completo el pabellón de Filología, así como rehabilitar el edificio central del conjunto.

La obra costará alrededor de 19 millones de euros y es urgente, ya que ambos edificios sufren accidentes de forma periódica debido a la antigüedad y el mal estado de las instalaciones. Uno de los episodios más graves ocurrió el pasado mes de septiembre, cuando se derrumbó el techo de un despacho.

El nuevo edificio, que linda con la entrada al campus, cambiará por completo la distribución actual. Se ha previsto que el acceso al mismo se iguale al del edificio central, rebajando un piso. Además, será de emisiones casi cero y utilizará avanzados sistemas de aprovechamiento de la temperatura y energía en el subsuelo, a través de los conocidos como "pozos canadienses".

Tendrá dos grandes patios interiores a los que darán todos los despachos y que permitirán que haya luz natural; estos estarán cubiertos con unas cristaleras y se podrá cambiar su uso en invierno o verano. Además, la parte frontal del bloque tendrá una enorme sala de lectura, que sustituirá a la que existe actualmente. Se ha decidido que los platós de televisión (para los alumnos de Periodismo) estén en dos alturas y ambos edificios estarán conectados mediante unas pasarelas que comunicarán las plantas de los edificios y que, a priori, serán acristaladas.

El decano de la Facultad, Eliseo Serrano, explicó que se trata de una "muy buena noticia" y detalló que en unas semanas se convocará la comisión para el seguimiento de la reforma.

Sin decisión definitiva sobre los plazos

No obstante, sigue en el aire si finalmente el plazo de los trabajos, una vez empezados, podrá rebajarse en 18 meses. Esta decisión compete al Gobierno de Aragón, y la Universidad de Zaragoza insiste en que organizativamente podría llevarse a cabo. El vicerrector de Infraestructuras, Francisco Serón, ha explicado a algunos alumnos presentes en el acto que en febrero les comunicarán a qué edificios del campus y cómo podría trasladarse de una vez a 3.000 estudiantes y 400 profesores.

El director general de Universidades del Gobierno de Aragón, José Antonio Beltrán, estima que aún es pronto para decidir si es posible recortar los plazos, aunque el interés es "máximo".