Los recortes del Gobierno de Mariano Rajoy en las universidades públicas del país están afectando al normal funcionamiento de estas instituciones, también en la de Zaragoza. La famosa tasa de reposición impuesta desde Madrid desde hace dos años, que solo permite renovar el 10% de las plazas vacantes por jubilaciones u otro tipo de circunstancias, está poniendo en serios aprietos al campus aragonés.

Así lo asegura su vicerrector de Profesorado, José Antonio Mayoral, quien recuerda que pese a que ya hay más de 30 puestos por cubrir -entre cátedras y profesores titulares-, “solo podremos convocar tres plazas”. Y eso que en este año más de 40 profesores han acabo su formación postdoctoral (se unen a una larga lista de profesionales acreditados sin opciones) que estarían ya en condiciones de ocupar, con creces, las plazas libres si no fuera por las cortapisas impuestas con la tasa del 10%.

“Además -continúa Mayoral-, tenemos el problema de las plazas en Medicina, que al no ser vinculadas tienen que ser funcionarios”. Una situación, a su juicio, “absurda”, ya que “al venir de profesores siguen siendo funcionarios pero se les aplica igualmente la tasa de reposición”.

Y aún hay más piedras en el camino, ya que según las instrucciones del Gobierno central, la mera convocatoria de una plaza, aunque quedara desierta, “ya agota tasa de reposición”. Con este panorama se encuentran los responsables de la institución académica desde hace dos años para hacer frente a la renovación del profesorado.

“De momento los vamos manteniendo con contratos temporales e interinos, para los que tienen que concursar. Y si algún día conseguimos sacar las plazas fijas, deberán concursar una segunda vez”, critica el vicerrector.

El propio rector de la Universidad de Zaragoza (y presidente de los rectores españoles), Manuel López, leyó un comunicado en el que calificaban las medidas aplicadas como “especialmente dolorosas y difícilmente justificables, por su mínimo impacto económico”.

250 contrataciones, al Supremo

En medio de estas tensiones entre los campus y el Gobierno, el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas ha impugnado ante el Tribunal Supremo los nombramientos de cerca de 250 profesores titulares y catedráticos en diferentes universidades, incluido un caso en Zaragoza, por haber sobrepasado la tasa de reposición impuesta.

En lo que respecta al expendiente abierto en la UZ, José Antonio Mayoral asegura que “fue un problema administrativo”, que retrasó la adjudicación de la plaza de este profesor. “Sin ese retraso, con haberlo hecho un mes antes, no habría pasado nada”, explica. Para evitar problemas mayores, se decidió que renunciara a la cátedra obtenida y volviera a la categoría de profesor titular.