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El Real Zaragoza destituye a Fran Escribá

El entrenador deja el club un año y 12 días después de su llegada para relevar al fallido Juan Carlos Carcedo. El técnico, tras un inicio de proyecto impecable en agosto, ha descarrilado y deja al equipo en caída libre en los dos últimos meses.

Despedida del entrenador del Real Zaragoza Fran Escribá
Despedida del entrenador del Real Zaragoza Fran Escribá
Toni Galan

Fran Escribá ha sido destituido oficialmente por el Real Zaragoza este lunes, casi 48 horas después de la última derrota contra el Huesca. El entrenador valenciano deja el club zaragocista de manera forzosa e indeseada un año y 12 días después de su llegada, entonces para relevar al fallido Juan Carlos Carcedo, que fue el elegido por la nueva propiedad de la SAD para abanderar el primer año de su proyecto. En este segundo capítulo de los regentes de la entidad, el técnico valenciano, tras un inicio de proyecto impecable en agosto (el equipo fue líder tras ganar los cinco primeros partidos de la liga), ha descarrilado y deja al equipo en caída libre en los dos últimos meses con solo 7 puntos sumados de los últimos 33 dirimidos.

Escribá quedó sentenciado en la noche del sábado tras perder 0-2 en la Romareda ante el Huesca, en lo que ha sido el sexto partido consecutivo sin victorias como locales delante de una masiva y decepcionada afición zaragocista, que pidió su cese abiertamente desde las gradas desde el minuto 58. El último triunfo, de hecho, data del 3 de septiembre, cuando los blanquillos superaron por 2-0 al Eldense.

Desde ese día, aún en verano, la cadena de fiascos contempla el empate ante el Racing de Santander (1-1), las derrotas seguidas frente al Alcorcón (0-1), Mirandés (0-2) y Eibar (2-3), la igualada con el Oviedo (0-0) y el reciente y referido nuevo varapalo recibido con el 0-2 de hace pocas horas frente al Huesca.

Entremedias, fuera de casa, el Real Zaragoza cayó 1-0 en Ferrol y 2-0 en Elche. Perdió ventajas en los últimos minutos que abortaron sus victorias en Gijón (2-2, después de ir por delante 0-2 a falta de 6 minutos) y Burgos (1-1, con el gol castellano recibido en tiempo de aumento). Y solo fue capaz de vencer en Andorra (0-1), el único oasis, gracias a que el rival jugó con un futbolista menos durante 80 minutos.

Como cúlmen de la espiral de malos y preocupantes resultados, la lacerante eliminación en la Copa del Rey, ocurrida hace cinco días ante el modesto Atzeneta valenciano, de la 5ª categoría del fútbol español (Tercera RFEF), con el que el Real Zaragoza perdió 2-1 en una de las noches más negras de su historia copera, ha desembocado en esta situación excepcional en el apartado futbolístico dentro del club que conlleva este cambio de paso radical.

Escribá, como tantos otros entrenadores en los últimos 11 años en Segunda División, ha pisado dos temporadas distintas al frente del Real Zaragoza, una como sustituto y otra como frustrado responsable de un nuevo plan deportivo. En su primer trecho, el año pasado logró reconducir la errática trayectoria de Carcedo, sin demasiados brillos y gracias al fichaje en enero del delantero Bebé, acabando la liga en el 13º lugar tras seis meses de muchos grises en el fútbol de un equipo que debía ser remodelado con hondura. 

En el segundo tramo de Escribá al frente del vestuario, el que ahora concluye y que se inició en julio con las máximas aspiraciones, las de estar en cabeza todo el año y optar al ascenso a Primera al final del torneo, es evidente que ha supuesto una enorme decepción, de difícil digestión en una directiva que restauró la plantilla con intenciones de crecimiento, puso a merced del entrenador un grupo de futbolistas de garantías (a priori, según sus credenciales) y logró seducir a la afición, que alcanzó en agosto su récord de abonados en este periodo de más de una década en Segunda, con casi 29.000 socios que ahora observan con asombro este desenlace.

El valenciano ha dirigido en este tiempo al Real Zaragoza en 45 partidos oficiales (43 de liga y dos de Copa) con 14 victorias, 17 empates y 14 derrotas. Las dos eliminaciones coperas ante equipo muy menores, pues el año pasado se estrenó precisamente como técnico zaragocista en la derrota por 1-0 ante el Diocesano de Cáceres, lo hacen pasar a la historia como un entrenador singular a través de este epígrafe de su currículum.

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