El Ayuntamiento de Zaragoza irá a los tribunales para desocupar los edificios expropiados de Pignatelli
El primero será el número 76 de la calle de Ramón Pignatelli, con 16 pisos que en los próximos meses pasarán a ser de propiedad municipal.
El Ayuntamiento de Zaragoza irá a los tribunales para desokupar el número 76 de la calle de Ramón Pignatelli. Será la política que siga con todos los edificios que pasen a ser de propiedad municipal y tengan problemas de delincuencia.
El Consistorio aprobará este viernes el pago de 470.848 euros correspondiente a los justiprecios expropiatorios de seis fincas de la zona, entre las que figuran el solar de Agustina de Aragón 29, el bloque de Agustina de Aragón 6 y el inmueble de Ramón Pignatelli 67, tapiado y desalojado tras el incendio registrado en septiembre de 2022.
Una vez hecho se necesitarán entre tres y seis meses para cumplimentar la documentación administrativa, como la inscripción definitiva en el registro de la propiedad o todo lo referente a las escrituras. El concejal de Urbanismo e Infraestructuras, Víctor Serrano, ha recalcado que Pignatelli va a ser “un territorio hostil para todos aquellos que quieran practicar la delincuencia” y que se intervendrá en todas las viviendas okupadas que generan este tipo de problemáticas.
El edil ha asegurado que el gobierno municipal mantiene “firme” su compromiso de seguir dando pasos. “Ninguno va a solucionar el problema totalmente, pero ya se empiezan a notar en el barrio”, ha dicho. El Ayuntamiento se ha hecho con 13 solares y edificios mediante compra directa, política a la que ha destinado unos dos millones de euros. Para las expropiaciones tiene reservados otros 1,8, partida que le permitirá hacerse con una decena de propiedades.
En el caso del número 67, el Consistorio se hará con doce pisos repartidos en cinco plantas que suman 505 metros cuadrados edificados, mientras que en el 76, el gobierno adquirirá el 77,25% de la propiedad. Es decir, 16 de los 19 pisos existentes, aunque se trabaja para expropiar el 100% y poder desalojar a todos los okupas.
Serrano ha querido dejar claro que el Ayuntamiento atenderá “desde el plano social” a todas aquellas personas que, por carecer de recursos, okupan una vivienda sin causar ningún tipo de problema de convivencia, para lo que se trabajará tanto desde Zaragoza Vivienda como desde el área de Acción Social.
Entre tanto, Urbanismo sigue planificando en los futuros pasos a seguir. El primer proyecto confirmado es el de Pignatelli 88, que se destinará a vivienda de alquiler asequible. La idea es ahondar “en las políticas de regeneración” en lo que resta de mandato y seguir trabajando en la construcción de vivienda en régimen de alquiler sin abandonar la adquisición de nuevas fincas.
De cara a 2024 habrá acciones “concretas” como la ejecución de la segunda fase de la residencia de Pontoneros y la del nuevo plan de iluminación, que acumula más de un año de retraso. “Hemos cumplimentado todas las adquisiciones previstas con los vecinos a corto plazo y prácticamente todas las de medio plazo. Las de largo plazo siguen siendo a largo plazo. Hablamos de operaciones de una elevada complejidad jurídica por la atomización de las viviendas, con casos de propietarios que fallecieron hace ya un tiempo y no tienen herederos reconocidos”, ha expuesto.
