patrimonio

Antiguas cruces funerarias para decorar el camino de Cretas a la ermita de la Misericordia

Los artísticos crucifijos se remontan a principios del siglo XX y proceden de tumbas anuladas para construir nichos.

Conjunto de cruces de forja que se reubicarán en el camino a la Misericordia.
Conjunto de cruces de forja que se reubicarán en el camino a la Misericordia.
Antonio Gimeno

El Ayuntamiento de Cretas planea reutilizar un lote de doce artísticas cruces de forja extraídas del cementerio municipal por la eliminación de enterramientos en el suelo como decoración de la Via Sacra, el camino peatonal que comunica el casco urbano con la ermita gótica de la Misericordia. Los crucifijos, que en algunos casos se remontan a principios del siglo XX, están actualmente almacenados en el campo santo a la espera de su nuevo destino.

Una de las cruces ya ha sido colocada en el camino a la Misericordia y el historiador local Juan Luis Camps adelanta que el resto tendrán el mismo destino, aunque señala que la actuación se llevará a cabo en función de las disponibilidades económicas. Los crucifijos presentan una buena factura y podrían proceder de talleres locales, aunque su origen es desconocido.

El antiguo camino de la Via Sacra, que comunicaba Cretas con la ermita de la Misericordia.
El antiguo camino de la Via Sacra, que comunicaba Cretas con la ermita de la Misericordia.
Juan Luis Camps

Destaca una pieza muy decorada destinada a la tumba de la «joven Serafina Riba Jasá», que murió en 1916 a los 19 años. También es llamativa la cruz que remataba el enterramiento de Ismael Fon Loras, fallecido en 1914 a los 59 años. Otras son más sencillas y están dedicadas a vecinos que perecieron en las primeras décadas del siglo XX y cuyo recuerdo ha sobrevivido hasta hoy gracias a estos crucifijos artesanales.

Camps señala que las cruces, por su calidad, corresponden, previsiblemente, a personas acaudaladas porque "no todo el mundo se las podía permitir en Cretas hace un siglo". Añade que, seguramente, fueron arrancadas con motivo de la construcción de nichos. Su nuevo destino estará de nuevo a la vista de todos, en el recorrido empedrado que comunica el pueblo con la Misericordia, que está operativo, al menos, desde el siglo XVII.

Juan Luis Camps cuenta que la Via Sacra estuvo completamente operativa hasta que en el año 1910 la construcción de la carretera que comunica la localidad con la vecina Calaceite atravesó el antiguo camino, que esta jalonado distintos elementos religiosos. Añade que el trazado discurre por la divisoria de aguas entre las cuencas de los ríos Algars y Matarraña y ofrece una espectaculares vistas a los Puertos de Beceite.

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