Tres pueblos románticos de Aragón para visitar esta semana y celebrar San Valentín
Si quieres celebrar por todo lo alto que Cupido acertó con la flecha, no te pierdas estos tres lugares de Zaragoza, Huesca y Teruel en los que empaparte del romanticismo en estado puro.
¿Quieres celebrar San Valentín de la mejor manera? Desde grandes escapadas al extranjero hasta pequeños detalles, pero muy personales, lo cierto es que son muchas las opciones para demostrar a tu pareja lo que sientes el día de los enamorados. Si eres de los que todavía no saben qué hacer este 14 de febrero, te dejamos estos tres pueblos de lo más románticos en Aragón para celebrar que Cupido acertó con la flecha para perderte en sus calles y disfrutar de un día tranquilo y bonito en cualquiera de estos rincones de Zaragoza, Huesca y Teruel.
Qué ver en Tobed, el pueblo de Zaragoza que tiene a San Valentín como patrón
Una de las mayores representaciones del mudéjar en Zaragoza se encuentra en Tobed, que se ha convertido en la puerta de este estilo artístico por muchos motivos. El principal es la imponente Iglesia de Santa María, que data del siglo XIV, y es uno de los monumentos más genuinos del mudéjar en Aragón, así como está declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
También merece la pena visitar el palacio de los Canónigos y la iglesia de San Pedro, que conforman la fisonomía más característica de la villa, conservada hasta la actualidad. Esta belleza se complementa a la perfección con otros elementos muy interesantes en Tobed: la ermita de San Valentín; los restos del castillo, que albergan las reliquias del santo, martirizado en Roma en el siglo III; y la Lonja.
Los amantes del senderismo también tienen una cita en este encantador pueblo zaragozano. Aquí pueden disfrutar de agradables rutas en el entorno de las sierras ibéricas de Vicor y Algairén.
Qué ver en Valderrobres, la capital y el balcón del Matarraña
Valderrobres es uno de los pueblos más bonitos de España y está coronado por un enorme e imponente castillo, cuyas vistas de la localidad son preciosas. Se trata de un castillo-palacio que data de finales del siglo XII y una pieza clave en el territorio de Aragón. Además, fue residencia de varias familias nobles como los Oteyza y Don Pedro Martínez de Luna.
Es una localidad que sorprende a los visitantes, que entran cruzando el río Matarraña a través de un puente medieval y les transporta hasta otra época, ya que la Puerta de San Roque no deja indiferente a nadie. También merecen una visita la iglesia de Santa María la Mayor, el Ayuntamiento o la Casa de los Moles.
Este pueblo turolense es ideal para visitar en esta época del año y disfrutar de la naturaleza, ya que se puede practicar senderismo o hacer trekking por sus inmediaciones, así como tomar espectaculares panorámicas desde la zona, especialmente al atardecer. Forma parte de la conocida como 'Toscana española', la Comarca del Matarraña, en la provincia de Teruel.
Qué ver en Lárrede, un pequeño y romántico pueblo de Huesca
Lárrede es un pueblo del siglo X, situado a orillas del río Gállego, con paisajes espectaculares en un entorno único, una amplia oferta turística, gastronómica y cultural y una riqueza natural y patrimonial excelentes que nada tiene que envidiar a otros lugares.
Entre los atractivos turísticos del pueblo se encuentran la Iglesia de San Pedro de Lárrede, modelo precursor de las demás iglesias del Serrablo; Casa Isabal, una casa infanzona del siglo XVII que conserva su estado original y una de las mejores muestras de arquitectura popular serrablesa; y La Torraza, un bello torreón vigía que se sitúa en lo alto de un cerro próximo al pueblo.
Además, esta localidad, perteneciente al municipio de Sabiñánigo, alberga el hotel más romántico de Aragón: el Hotel Viñas de Lárrede. La ubicación privilegiada en la que se asienta ofrece a sus clientes unas impresionantes vistas de los majestuosos picos de los Pirineos, que superan los 3.000 metros de altura y te dejarán con la boca abierta. Además de una perfecta combinación de elegancia y confort y un sinfín de excursiones y actividades en la naturaleza que hacen de este lugar un destino ideal para celebrar el amor en la comunidad.
