Cómo poner el coche a punto para las vacaciones de verano y evitar sustos
El periodo estival está a punto de comenzar y las cremas solares, la toalla, la búsqueda de billetes más económicos y la revisión del vehículo con el que se va a viajar son temas fundamentales para disfrutar de un merecido descanso. Es importante estar al día de las revisiones del motor, del líquido de frenos, limpiaparabrisas, el aceite, las ruedas deben estar en buen estado para circular, los faros intactos o evitar problemas en la dirección.
Aunque un accidente de tráfico puede llegar por múltiples razones, desde el exceso de velocidad al mal estado de la carretera, un problema de visibilidad, somnolencia o imprudencia ajena, es muy importante tener el vehículo propio en el mejor estado posible: al día en las revisiones de motor, con las ruedas en el estado más óptimo posible para circular, con los faros intactos y sin problemas en la dirección, por citar lo más importante.
Quienes no tienen todo esto como una prioridad deben estar prevenidos y hacer los deberes, porque este año van a abundar las sanciones a quienes sean sorprendidos al volante de un vehículo a motor sin una puesta a punto adecuada. Aunque cada campaña de sensibilización (ya van varias este año) se concentra en periodos cortos, la advertencia es permanente y contribuye de manera decisiva a minimizar riesgos.
La Dirección General de Tráfico (DGT) desarrolló la semana del 5 al 11 de junio una campaña especial de vigilancia y control del estado de los vehículos en funcionamiento. Los agentes viales tenían la orden de extremar la vigilancia en la verificación del mantenimiento y la puesta a punto de los elementos cruciales del automóvil, para garantizar que no son un riesgo a la hora de provocar accidentes individuales o colectivos.
El lenguaje de las multas, por desgracia, es el que más resuena cuando las recomendaciones se convierten en posibles sanciones. El parque automovilístico español está envejecido en relación a otros países europeos, y la DGT quiere garantizar que los vehículos estén bien en cuanto a neumáticos, luces, frenos y señalización, además de estar al día con la ITV.
Las revisiones del coche
Aunque la campaña haya concluido, pueden seguir haciéndose de manera aleatoria. Comienzan por la dirección del vehículo. Luego van los neumáticos: el dibujo debe alcanzar al menos los 1,6 milímetros, y no presentar deformaciones o presión excesivamente baja. Los focos e intermitentes serán puestos a prueba para ver si funcionan, igual que la batería.
A continuación se comprueban de líquido de frenos, limpiaparabrisas y aceite, así como la tensión de las correas y el estado de los filtros de aceite, aire y polen.
También se revisará el correcto funcionamiento del aire acondicionado., si lo llevase, y la claridad de lunas, retrovisores y parabrisas: sin golpes ni rajas que pueda acabar en rotura. Por último, se revisa el sistema de inyección.
Con el coche a punto antes de salir a la carretera, el único reto es acertar con el destino de vacaciones y, una vez allá, aprovechar de la mejor manera posible los días de descanso para regresar a la rutina diaria con las pilas cargadas y muchos recuerdos.
