La multa de 200 euros que la DGT te puede poner por hacer este gesto tan habitual
La Dirección General de Tráfico pretende, con esta sanción, reducir los accidentes en las carreteras españolas por exceso de velocidad.
La Dirección General de Tráfico (DGT) continúa trabajando para reducir los accidentes de tráfico en España. El exceso de velocidad es uno de los principales motivos por los que se producen los siniestros más graves. La colocación de radares fijos, móviles, de tramo y ahora también de los denominados veloláser son una de las medidas impuestas por la DGT para minimizar esos accidentes. Aunque lo cierto es que, en numerosas ocasiones no cumplen con la función esperada.
Y es que, a pesar de las advertencias por parte del organismo de tráfico, los conductores siguen sin concienciarse de la importancia de cumplir con los límites de velocidad en todas las vías de España. Algunos de ellos, ante el aviso de la existencia de un radar o debido a los detectores que llevan en el interior del vehículo, reducen o frenan para evitar ser cazados por el radar.
Un gesto que, a pesar de que no conlleva una sanción específica, ya que no hay una normativa al respecto, puede ser sancionado por un agente de tráfico amparándose en el artículo 53 del Reglamento de Circulación en el que una reducción brusca de la velocidad puede suponer un riesgo para los demás conductores.
A cuánto asciende la multa por frenar ante un radar
La DGT está al corriente de esta práctica por lo que en el caso de que los agentes de tráfico consideren que el frenazo antes de llegar al radar supone un peligro, puede ser sancionado con una multa de 200 euros y una retirada de cuatro puntos del carnet. Para reducir la velocidad hay que cerciorarse que se respete la distancia con los otros vehículos.
Eso sí, el organismo de tráfico también dispone de otras herramientas para poder limitar estas infracciones y es con un tipo de radar que no es tan conocido entre los conductores pero que puede sorprenderles cuando realizan esta práctica. Son los llamados radares en cascada y su objetivo principal es cazar a aquellos que reduzcan su velocidad justo antes de la llegada del radar, para luego volver a acelerar.
