Tarazona, el rincón de Aragón elegido entre los más bonitos de España para viajar en verano de 2023

Los expertos de Viajes National Geographic seleccionan 20 localidades españolas para las escapadas estivales de 2023. 

Vista de la localidad de Tarazona.
Vista de la localidad de Tarazona.
Laura Uranga

Las listas de los pueblos bonitos en las publicaciones turísticas tiene un riesgo. A veces, llamar pueblo a una localidad puede resultar ofensivo a quienes viven en ella y están acostumbrados a llamarla ciudad. No hay un número de habitantes concreto para pasar de una palabra a otra; tiene que ver con lo habitual en la zona, la media de las poblaciones cercanas, la historia y la tradición. Alrededor de Madrid hay pueblos (también llamados ciudades dormitorio) de más de 100.000 habitantes.

La revista ‘National Geographic’ no desconoce este hecho, pero viendo sus publicaciones de compilación de lugares parece llamar pueblo a localidades que además de no ser capitales de provincia tienen un censo moderado en relación a sus cabeceras provinciales.

En su última edición digital, la revista selecciona 20 por la belleza de sus paisajes y configuración arquitectónica. Entre ellos hay un representante aragonés; es la ciudad de Tarazona, en el norte de la provincia, limítrofe con Navarra, La Rioja y Soria.

Los 19 restantes son: Valldemossa (Mallorca), Setenil de las Bodegas (Cádiz), Ayna (Albacete), Besalú (Girona), Haría (Lanzarote), Bocairent (Valencia), Almargo (Ciudad Real), Calatañazor (Soria), Zafra (Badajoz), Allariz (Ourense), San Vicente de la Sonsierra (La Rioja), Mundaka (Vizcaya), Cudillero (Asturias), Estella (Navarra), La Alberca (Salamanca), Moratalla (Murcia), Peñaranda de Duero (Burgos), Valle Gran Rey (La Gomera) y Alarcón (Cuenca).

Qué ver en Tarazona: monumental y serena

De las muchas razones para visitar Tarazona, destacan dos: su proximidad con el Moncayo, que parece ampararla, y la magnífica catedral gótica con notas renacentistas en su reformulación, consagrada a Santa María de Huerta y reabierta al público en 2011 tras un larguísimo e interrumpido proceso de restauración.

La Fundación Tarazona Monumental ofrece una guía completa para explorar a pie la ciudad sin perderse ninguna de las joyas históricas visitable, sobre todo en la zona histórica. Las ermitas de San Juan Bautista, Santa Rosa y San Vicente, La Anunciación de Tórtoles, las iglesias de la Concepción y la Merced o la iglesia de San Atilano, el patrón, hoy desacralizada y convertida en centro cultural.

Siguiendo con las iglesias, hay que citar las de San Joaquín, San Miguel Arcángel, Santa Ana, Santa Teresa o Santa María Magdalena, el claustro de San Francisco de Asís, el Palacio Episcopal, la Plaza de Toros Vieja, la Mezquita de Tórtoles y el hermoso Teatro de Bellas Artes, con menciones especiales para dos grandes figuras turiasonenses del espectáculo: Paco Martínez Soria y Raquel Meller.

El actor, por su parte, tiene además una estatua en pleno centro de la ciudad, junto al cauce del Queiles, e inspira el festival anual de cine de comedia de la localidad, que tiene en el restaurante Saboya a otra visita obligada: sus paredes están forradas de fotografías de estrellas en el lugar.

Además del bagaje monumental y artístico, Tarazona tiene una de las tradiciones festivas más populares del norte de España: cada verano, una persona de la localidad Encarna al Cipotegato, que recorre las calles enmascarado y en traje de colores vivos mientras soporta una lluvia de tomates. Aunque parece un castigo, es un honor.

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