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¿Disfrutas trabajando? Descubre si cumples los requisitos para lograrlo

No es suficiente con encontrar un buen empleo, sino que hace falta disponer de una buena actitud para aprovechar al máximo la trayectoria profesional.

Flexibilidad laboral, clave para lograr la motivación de la persona trabajadora.
Pixabay

Los gurús empresariales lo tienen claro: el bienestar del trabajador es directamente proporcional al rendimiento de la organización. Por eso cada vez son más las empresas que incorporan a su departamento de recursos humanos un área específica para procurar la satisfacción de sus empleados. La oportunidad de conciliar la vida laboral con la personal, disponer de un salario competitivo y contar con un buen ambiente o un líder eficaz son factores que lograrán que los empleados estén más contentos y motivados.

Sin embargo, las personas también deben poner de su parte para conseguir ese bienestar. Según Joaquín Viñas, formador en Felicidad en el Trabajo, existen tres claves: primero, encontrar y desarrollar un propósito; segundo, practicar la gratitud tanto como sea posible; y tercero, tener siempre una actitud positiva, entendida como una “combinación de optimismo y acción”.

Además, para lograr este objetivo, y de forma más concreta es preciso desarrollar y trabajar las siguientes competencias personales:

  • Ser creativo

    La creatividad servirá para tomar distancia con las pautas que marcan la rutina del trabajo diario y que limita al personal de una organización a desempeñar su labor bajo los mismos criterios de siempre . Por ello, es importante aportar nuevas ideas y salir de la zona de confort siempre que se pueda. La constante actualización de conocimientos derivada del interés por el sector o perfil que corresponda proporcionará más fácilmente ese enfoque diferente.

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  • Automotivarse

    Buscar siempre la excelencia en lo que se hace y marcarse retos a nivel profesional es una labor individual necesaria para seguir avanzando en el terreno laboral. Obviamente son muchos los factores externos que intervienen en esta motivación, pero la actitud personal influirá notablemente en el resultado.

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  • Ser un buen compañero

    Para estar satisfecho con el día a día de la empresa u organización, es fundamental contribuir a crear un clima de colaboración y entendimiento, en el que se genere un debate constructivo y positivo, buscando soluciones a los conflictos. Trabajar en equipo requiere de ciertas habilidades que se pueden entrenar y que repercuten considerablemente en la buena marcha de un proyecto o negocio.

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Desenvolverse en un ámbito colaborativo, fomentar la creatividad y buscar la motivación en el interior con nuevos retos son aptitudes que pueden adquirirse a través de cursos de especialización y programas de formación superior. Una opción interesante para el verano que puede venir muy bien para arrancar el curso que viene.