Tercer Milenio

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Aquí hay ciencia

La ciencia del estornudo: hasta 8 metros de asombroso alcance

Un estornudo no es (necesariamente) sinónimo de coronavirus, de gripe o de enfermedad; pero sí de reflejo involuntario, de sobrepresión y de chorro de alta velocidad. Además de estar directamente emparentado con el deporte, con trastornos genéticos raros (y no tan raros) y hasta con el sexo. Aquí te contamos todo lo que debes y quieres saber sobre los estornudos.

Los estornudos funcionan como uno de los vehículos más eficaces para la transmisión de agentes infecciosos aéreos
Los estornudos funcionan como uno de los vehículos más eficaces para la transmisión de agentes infecciosos aéreos
James Gathany

A raíz de la crisis sanitaria del coronavirus seguramente te ha pasado que, al estornudar en un lugar público, la gente a tu alrededor te ha mirado con desconfianza y reprobación. E incluso que tú mismo hayas hecho otro tanto al oír un estornudo en las proximidades. Y lo cierto es que no les/os falta razón, ya que los estornudos son uno de los vehículos más eficaces para la transmisión de agentes infecciosos aéreos gracias a su increíble rango de alcance –8 metros de récord y hasta 10 minutos en suspensión–. Tan cierto como que hay muchas más cosas que debes –y que, de hecho, estás deseando– saber sobre el arte de estornudar… ¿o mejor hablamos de ciencia?

Lo primero es lo primero: estornudar tiene su ciencia.

¿Qué es un estornudo?

Pongámonos ‘académicos’ por un párrafo –o dos–. Un estornudo es un impulso reflejo del organismo que actúa como mecanismo de defensa para limpiar las fosas nasales y los conductos respiratorios de agentes y partículas extrañas; y que se manifiesta como una súbita, violenta y sonora expiración de aire a través de boca y nariz a modo de espasmo muscular.

¿Qué genera el estornudo?

Los estornudos se producen cuando agentes extraños como polvo, polen, patógenos, moléculas de perfumes, sustancias irritantes, etc. penetran y superan la primera barrera defensiva del aparato respiratorio, es decir, los pelos presentes en el interior de los orificios nasales y que actúan a modo de filtro o escoba que detiene, atrapa y barre la mayor parte de las partículas que viajan y flotan en el aire. Cuando alguna de dichas partículas es capaz de superar esta trampa pilífera y alcanza las fosas nasales, esto provoca la reacción de determinadas células que, al identificarlas como cuerpos extraños, comienzan a liberar sustancias como histamina o leucotrienos; lo que a su vez provoca que los capilares de la nariz comiencen a gotear más de la cuenta, produciendo un intenso picor que desencadena la inmediata respuesta del sistema nervioso. Llegados a este punto, el estornudo ya es inevitable. La señal nerviosa viaja hasta el cerebro, en concreto hasta el tallo cerebral, que es la región que controla los reflejos automáticos o involuntarios y que genera una señal de respuesta que pone en marcha el mecanismo físico del estornudo; esto es, activa los músculos implicados en el mismo.

Cómo reacciona mi organismo

Todo comienza con una profunda inspiración de aire para llenar los pulmones. A continuación, la glotis se cierra y el diafragma se contrae provocando un incremento de presión en el pecho. Una sobrepresión que, al alcanzar un nivel crítico, fuerza la reapertura de la glotis y la violenta expiración de un chorro de aire por boca y nariz a gran velocidad que arrastra y expulsa a aquellos agentes extraños.

En este sentido, es un proceso comparable a la sonora subida del café en una cafetera italiana, en la cual la sobrepresión que se produce al calentar el agua del depósito inferior provoca el chorro ascendente que arrastra las moléculas del café. O también se asemeja al característico silbido que emite la olla exprés cuando la presión en su interior se hace tan grande como para provocar la emisión del chorro de vapor a través de la válvula.

Un estornudo, en cifras

  • Todo el proceso del estornudo dura, por término medio, 150 milisegundos.
  • El chorro de aire, gotitas de saliva y moco, y partículas extrañas atrapadas en ellas emerge de la boca a una velocidad que llega a alcanzar los 160 km/h. Cuanto más fuerte y ‘profundo’ es el estornudo, a mayor velocidad emerge el chorro.
  • Cada estornudo expele entre 40.000 y 80.000 de estas gotitas.
  • El espray o ducha de gotitas puede alcanzar una distancia de hasta 8 metros y se esparce por un área de entre 1,5-2 metros a la redonda.
  • Según su peso, las gotitas y partículas pueden permanecer –y viajar– en suspensión en el aire hasta 10 minutos.

Cómo actuar en caso de estornudo (para que te miren un poco menos mal y, sobre todo, no contagiar a nadie)

Cuando se estornuda hay que cubrir la nariz y la boca con un pañuelo desechable y acto seguido echarlo a la basura; o bien cubrirse la boca y la nariz por completo con el codo flexionado. Con ello impedimos esparcir los microbios y contagiar al resto de las personas. Si tapamos la boca con la mano, estamos ayudando a propagar los virus, por ejemplo cuando después damos la mano a alguien o tocamos una superficie como el pomo de una puerta o luego nos tocamos los ojos, la nariz, etc. En todo caso, es fundamental lavarse las manos con jabón tras estornudar para eliminar los posibles patógenos.

Y, ahora sí, todo lo que siempre quiso saber y nunca se atrevió a preguntar:

¿Es normal estornudar varias veces seguidas de tirón?

Sí, es normal. Aunque muy eficaz, el estornudo no es un mecanismo de limpieza infalible y, a veces, el cuerpo precisa varios intentos para expulsar todos los agentes extraños. Por eso mismo, la gente mayor suele estornudar varias veces seguidas. Con la edad, los músculos flaquean y se debilitan, por lo que la potencia y, por consiguiente, la eficiencia del estornudo menguan.

¿Por qué estornudo cuando hace mucho sol?

Si lo haces, entonces formas parte de ese 20-35% de la población que sufre del bautizado –presuntamente de forma ingeniosa– como ‘síndrome helio-oftálmico de estornudos compulsivos autosómico dominante’ (ACHOOs por sus siglas en inglés; ahí el supuesto ingenio). Síndrome también conocido como reflejo del estornudo fótico. Una condición genética hereditaria (y dominante) que provoca que quienes la presentan estornuden cuando la luz solar es muy intensa. Parece que el motivo es que el intenso parpadeo que produce enfrentarse de repente a tanta luminosidad provoca un mensaje equívoco en el cerebro de los afectados, que lo confunde o percibe como la señal que induce el estornudo.

Entonces, ¿se puede forzar el estornudo parpadeando?

Sí se puede –y esto no es un eslogan–. Tal cual se ha explicado en la pregunta previa, un intenso parpadeo puede llegar a confundir al cerebro desencadenando la respuesta del estornudo. Tanto más si presentas Achoos.

¿Y por qué estornudo sistemáticamente después de comer?

Básicamente porque eres un tragón que presenta otra condición genética bastante más rara y que hace que se estornude cuando se llena el estómago. De nuevo, se cree que el motivo es que la señal de presión sobre el diafragma provocada por un estómago dilatado confunde al cerebro.

¿Estornudo cuando duermo?

No. Cuando se duerme, el sistema o circuito nervioso responsable de este mecanismo se desactiva. Se supone que es una adaptación para facilitar y favorecer el descanso.

¿Por qué estornudo más cuando voy al gimnasio?

Hay dos posibles respuestas. O tu 'gym' está mal ventilado y hay muchos agentes y partículas flotando en el ambiente. O, lo más probable, como consecuencia del ejercicio realizado. La demanda extra de oxígeno por parte de nuestros músculos cuando se realiza un ejercicio suficientemente intenso nos obliga a aumentar y acelerar la respiración, lo que a su vez provoca una mayor sequedad en la nariz y la boca. Para contrarrestarla, los capilares de la nariz gotean más de la cuenta, circunstancia que, como se ha visto, desencadena el mecanismo del estornudo.

¿Y es normal estornudar después del sexo?

Sí. Uno de los motivos son los jadeos, que producen un efecto de sequedad análogo al deporte. Aunque también hay una implicación del sistema nervioso parasimpático. Lo que explicaría que lo normal sea estornudar después… afortunadamente para tu pareja.

¿Los animales también estornudan?

Claro. El estornudo es un mecanismo de limpieza del aparato respiratorio compartido por bastantes animales –¿quién no ha oído estornudar a un perro o a un gato?–. Y, al parecer, el que más lo pone en práctica es la iguana, que lo emplea como vía para expulsar ciertas sales que produce como residuos durante la digestión.

¿Se me para el corazón cuando estornudo?

No, lo que sucede es que, al contraerse el pecho, esto afecta y modifica el ritmo cardíaco. Pero, tranquilo, no vas a morir por estornudar unas cuantas veces seguidas.

¿Es imposible mantener los ojos abiertos al estornudar?

No. Aunque cerrar los ojos forma parte del reflejo involuntario, se ha comprobado que si uno se fuerza, puede llegar a mantenerlos abiertos. Otra cosa es que hacerlo sea recomendable, ya que el esfuerzo y la violenta sacudida que implica el estornudo puede llegar a ocasionar el debilitamiento y rotura de capilares del globo ocular o incluso desprendimientos. Y otro tanto sucede si se intenta contener o silenciar el estornudo, que puede llegar a provocar molestias y daños en el oído.

¿Y por qué suena como achoo?

Tiene que ver con el funcionamiento del aparato fonador: la intensa inhalación inicial es responsable del ‘aaa-’. Y la súbita liberación de la sobrepresión acumulada provoca que la lengua presione contra el cielo del paladar al emerger el chorro generando el sonido ‘–chooo’.  

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