El fruto seco que te ayudará a reducir el colesterol 'malo'
Este alimento tiene más ácidos grasos omega-3, esenciales para el correcto funcionamiento del organismo, que el salmón.
Los ácidos grasos omega-3 son básicos para el correcto funcionamiento del organismo, no obstante, nuestro cuerpo no los produce. Por eso, es importante incorporarlos a través de la dieta, cuidando lo qué comemos. Y, en España, tenemos la suerte de contar con una gran variedad de alimentos que poseen estos ácidos. Los que, por cierto, están compuestos por tres variantes principales: el ácido α-linolénico (ALA), el ácido eicosapentaenoico (EPA) y el ácido docosahexaenoico (DHA).
De estos ácidos, es muy común encontrar el EPA y DHA en los pescados de aguas frías, como el salmón, cuya cantidad de grasa corporal determina la concentración de estos ácidos grasos. Por eso, siempre hemos escuchado que es bueno comer salmón para que nuestro cuerpo adquiera omega-3. Pero, ¿cuál es el problema? La concentración de omega-3 en pescados como el salmón puede verse influenciada por factores como el entorno, la dieta de los peces o el clima.
Así que, los nutricionistas recomiendan encontrar otras fuentes para que nuestro cuerpo consiga los ácidos grasos omega-3, para completar nuestra dieta de pescados azules. Y, algunos frutos secos son una fuente vegetal importante de ALA que se puede convertir en EPA y DHA en nuestro organismo. Las semillas de calabaza o las nueces son un claro ejemplo.
Propiedades de las nueces
Lo primero que hay que destacar es la multitud de beneficios que tienen las nueces. En un estudio realizado por el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre de los Institutos Nacionales de la Salud, en Estado Unidos el pasado año, a más de 3.000 personas, se observó que en comparación con los no consumidores, el consumo de nueces se asocia con menor riesgo de enfermedades cardiovasculares (ECV).
La nuez también es fuente de hierro, zinc, potasio, selenio, fósforo o magnesio, y vitaminas B1, B3 (niacina), folatos y vitamina B6. Así que su consumo diario o el incluirla en la dieta tiene muchos beneficios para la salud. Según los especialistas de la Clínica Mayo contribuye a mantener una dieta cardiosaludable.
Y, distintas investigaciones a lo largo de los años han demostrado también que el consumo regular de nueces puede ayudar a reducir el llamado 'colesterol malo'. Además, el consumo de este fruto seco también está vinculado con las propiedades antiinflamatorias, gracias al gran contenido de omega-3 que contienen las nueces.
