La escultura de homenaje al cineasta oscense Carlos Saura, fallecido el 10 de febrero de 2023, que fue colocada hace justo un año en la céntrica calle Duquesa Villahermosa de Huesca ha aparecido manchada con grafitis. Es el segundo ataque vandálico que sufre esta obra realizada por el artista Julio Luzán. 

Se trata un busto siluetado que representa a Saura de perfil, con sus gafas y su cámara de fotografía colgada al cuello. Una imagen que con la que paseó por la ciudad en los últimos años, cuando acudía al Festival Internacional de Cine. 

Tanto el busto como el pedestal de piedra que lo sujeta han aparecido vandalizados con sendos grafits de color verde chillón que llevan la firma de 'Tox'. 

Ya a principios de año, los técnicos de la Escuela de Escuela Superior de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Aragón (Escyra), con sede en Huesca, consiguieron limpiar una mancha que había aparecido en la escultura aunque no del todo ya que se eliminó del busto pero queda un rastro muy visible en el pedestal de piedra. Se ha valorado la posibilidad de pulirla porque no se podía quitar de ninguna forma, según informan fuentes del Ayuntamiento de Huesca.

El Consistorio tiene firmado un convenio de colaboración con la Escyra para formar a los trabajadores municipales en la limpieza de los grafitis en edificios que, por su singularidad, necesiten tratamientos específicos y especializados.

En 2023, se abrieron 87 expedientes de particulares que solicitaron la intervención del Ayuntamiento. Mientras, el coste de eliminar los grafitis en la ciudad asciende a unos 60.000 euros al año entre el material que se empleo y el gasto en personal y maquinaria. 

Hace solo dos meses, Eulalia Ramón, viuda de Saura, y la hija de ambos, Anna Saura, volvieron a visitar la escultura con motivo de otro homenaje que rindió el Ayuntamiento en el primer aniversario del fallecimiento del cineasta  colocando una placa en la casa donde nació en 1932 en el número 2 de calle Padre Huesca.