Aspace Zaragoza celebra 50 años promoviendo la inclusión social
En la Sala de la Corona del Gobierno de Aragón se ha reconocido a usuarios, trabajadores y a entidades como el Grupo Social ONCE
Aspace Zaragoza nació en 1974 cuando un grupo de familias planteó la necesidad de agruparse y crear una asociación para cubrir las carencias existentes de atención y cuidado de las personas con parálisis cerebral. 50 años después han cambiado muchas cosas y ayer, en la Sala de la Corona del Gobierno de Aragón, se mostró el resultado de cinco décadas de trabajo, esfuerzo y compromiso social.
Durante la velada hubo muchos protagonistas, pero los más importantes, sin duda, fueron las personas con parálisis cerebral, sus familias y los trabajadores de la fundación. En este mensaje insistieron la presidenta y la gerente de Aspace Zaragoza, Consuelo Ciria y Mónica Iglesias. “Es un orgullo que esta celebración llegue tras la modificación del artículo 49 de la Constitución que, léxicamente, por fin trata de una manera digna a las personas con discapacidad, pero ahora eso hay que ponerlo en marcha”, destacaron.
![LA CONSEJERA CARMEN SUSIN VISITA LAS INSTALACIONES DE ASPACE / 16/01/2024 / FOTO OLIVER DUCH [[[FOTOGRAFOS]]]](https://imagenes.heraldo.es/files/image_320_180/uploads/imagenes/2024/01/16/aragon-1.jpeg)
El acto tuvo su parte reivindicativa, pero puso especialmente el foco en los logros y, por encima de todo, en los agradecimientos. El primero de ellos fue para Juan Alberto Belloch, miembro del patronato de la Fundación Aspace Zaragoza “por su sensibilidad y apoyo, principalmente en su época como alcalde de Zaragoza”.
Vicky Romeo y Carlos Grasa recogieron el premio a los usuarios de la fundación. “Es difícil expresar con palabras lo que significáis para nosotros -les trasladó Manuela Muro, presidenta de la Confederación Aspace-, juntos aprendemos cada día la importancia de los pequeños gestos y el tiempo compartido”.
La velada continuó con una de las sorpresas de la tarde. Fue para Cristina Parrots, trabajadora de la fundación. En su figura, de alguna forma, se simbolizó la entrega, responsabilidad y compromiso de las 90 personas que trabajan en la entidad. “Por tu cariño, tu manera especial de ser y sentir, y por tu preciosa sonrisa, perceptible incluso tras la mascarilla, te mereces este reconocimiento”, se escuchó en la sala.
Seguidamente, la maestra de ceremonia, Adriana Oliveros, invitó a subir al escenario a la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, y también intervino la ministra de Educación, Pilar Alegría, a través de un vídeo.
Otro reconocimiento muy emotivo fue para el propietario del restaurante Pájaros en la Cabeza, Alberto Muñoz, que dirige este proyecto único de inclusión laboral. Durante el acto se recordó su apoyo a Aspace, primero como voluntario y luego como uno más del equipo. El trabajo que desarrollan en su restaurante personas con Síndrome de Down y el convenido de prácticas laborales con Atades son dos detalles más del compromiso de Alberto, que recibió otra gran ovación.
La colaboración con el Grupo Social ONCE data de principios de los años 80 y este apoyo también se plasmó en forma de reconocimiento. Lo recogió la vicepresidenta de Igualdad y Recursos Humanos de la ONCE, Patricia Sanz. La colaboración con Aspace ha ido creciendo y hoy cubre los servicios que se prestan a ocho personas afiliadas entre el centro de día, residencia, aula de 0 a 3 años y centro escolar.
La tarde continuó con más sorpresas, como la que recibió Francisco Ratia de manos de la consejera de Bienestar Social del Gobierno de Aragón, Carmen Susín. No se la esperaba, pero fue “muy merecida”, tal y como se destacó por “su entrega al mundo de la discapacidad, tanto en el ámbito institucional como en el familiar”. Antes de la clausura y la foto de familia, el vicepresidente de la Fundación Aspace Zaragoza, Rafael Oliver, entregó el último reconocimiento a Amazon Web Services.
Durante el acto no intervino Óscar Alijarde, usuario de Aspace, pero él, que lleva casi 50 años recibiendo atención en el centro de día y en la residencia, volvió a poner el acento en los verdaderos protagonistas: “Nada de esto hubiera sido posible sin el apoyo de las familias y los trabajadores”.
