Los arqueólogos prevén hallar más de 200 enterramientos en la necrópolis de la calle Pomarón de Zaragoza
Las tumbas se fechan en los siglos XI y XII y corresponden a la época de la Zaragoza taifal, previa a la Reconquista
Los arqueólogos que trabajan en el solar de la calle de José Luis Pomarón de Zaragoza donde días atrás apareció una necrópolis islámica han localizado ya una treintena de tumbas, han excavado media docena de ellas y creen que al acabar los trabajos habrán sacado a la luz más de 200. Pero son datos muy prospectivos porque la excavación se inició el miércoles de la semana pasada y apenas se ha trabajado unos días en el solar.
Se trata de un espacio de unos 4.000 metros cuadrados donde la empresa Gestión Común tiene prevista una promoción inmobiliaria con 68 viviendas, 105 garajes y 69 trasteros, dos piscinas en cubierta, gastroterraza y gimnasio.
Gestión Común es también responsable de la construcción de un bloque de viviendas en un solar de la plaza del Ecce Homo donde hace unos meses salieron a la luz restos de tres mosaicos romanos. La excavación estuvo dirigida por los arqueólogos José Luis Cebolla y Francisco Javier Ruiz, que son quienes se ocupan también ahora de los trabajos en la calle de Pomarón. Hay una diferencia sustancial entre ambos casos, y es que mientras en Ecce Homo, en pleno casco viejo, era preceptiva la realización de catas arqueológicas, no resulta así en Pomarón.
Durante el vaciado del solar para la construcción de las viviendas, y ante la aparición de restos, se avisó a la Policía Nacional que, tras descartar que estos fueran recientes, notificó el hallazgo al Gobierno de Aragón. La promotora del edificio costeará la excavación arqueológica de esta necrópolis. "Estamos orgullosos de contribuir a conocer mejor el patrimonio y el pasado de la ciudad", asegura su director técnico, Mario Sanz.
En una esquina del solar, los arqueólogos han descubierto restos de una alquería o casa rural islámica. Pero lo más significativo es la localización de una necrópolis, una ‘maqbara’ musulmana, de la que hasta ahora se desconocía su existencia.
¿No está muy lejos esta necrópolis de lo que era la Sarqusta musulmana? "En realidad, no, está muy cerca de una de las antiguas puertas de la ciudad, la Puerta Quemada (confluencia de las actuales calles de Asalto y Heroísmo) y los musulmanes ubicaban sus necrópolis en el exterior de las ciudades -asegura Francisco Javier Ruiz-. En este caso creemos que la alquería es anterior a la necrópolis y luego, durante un tiempo, coetánea. En época romana e islámica, anteriormente a la necrópolis, esto fue zona de huertas".
Las fechas en las que se usó la ‘maqbara’ están bastante delimitadas. "Pensamos que es de época taifal, en un arco cronológico que va desde inicios del siglo XI hasta la conquista de la ciudad por las tropas de Alfonso el Batallador en 1118", subraya José Luis Cebolla.
Los enterramientos siguen el patrón conocido en el universo funerario islámico: la costumbre era, y es, lavar el cadáver, envolverlo en una tela blanca sin costuras a modo de sudario y enterrarlo directamente en un hoyo en el suelo, sin ataúd y orientado hacia la Meca. "A veces se marcaban las tumbas con tejas, cantos o alguna pequeña estela", apunta Francisco Javier Ruiz.
"Hemos visto dos niveles de enterramientos, uno, más antiguo y ordenado, en el que hay una separación de metro y medio entre cada tumba-. El otro nivel, superior, más cercano en el tiempo, ya no presenta las tumbas tan ordenadas", añade. Esto es bastante usual. Los dos arqueólogos excavaron hace años uno de los solares de la antigua necrópolis oriental de la ciudad (Tenerías/Alonso V/San Agustín), y allí encontraron hasta seis niveles de enterramientos. El solar de la calle de Pomarón es también solo una parte de la necrópolis, que se extendería por terrenos anejos.
Los especialistas excavarán uno a uno todos los enterramientos, los documentarán individualmente, levantarán los restos y los depositarán en el Museo de Zaragoza, al tiempo que continuará la construcción del edificio, que no se paralizará. La DGA está informada de los hallazgos.
