juego 

El guiñote, ¿un juego de azar o de estrategia?

La Universidad de Zaragoza realiza un estudio para la Asociación Aragonesa de Guiñote, en el que se radiografían 1,7 millones de partidas.

Alberto Planas muestra la web de la Asociación Aragonesa de Guiñote 'Guiñarte'.
Alberto Planas muestra la web de la Asociación Aragonesa de Guiñote 'Guiñarte'.

Ante la duda de si el guiñote depende más del azar o de la estrategia de los jugadores, la Asociación Aragonesa de Guiñote decidió impulsar un estudio matemático sobre el juego de cartas más conocido en Aragón. Recogió el guante el universitario Sergio Torralba, graduado en Matemáticas, quien realizó su Trabajo Fin de Grado (TFG) sobre esta materia dirigido por el profesor tutor Francisco Javier López, del departamento de métodos estadísticos de la Universidad de Zaragoza.

El informe se ha basado en el analisis estadístico de más de 1,7 millones de partidas, que la asociación ha aportado a través de su aplicación 'GuiñotePro'. El estudio se hizo con gente que había jugado como mínimo 200 partidas en el app y ha llegado a la conclusión de que “es mucho más importante tener buenas cartas que ser muy buen jugador o ser una pareja muy fuerte”, y resume que el guiñote es un juego más de azar (con un 90% de los resultados) que de estrategia (apenas un 10%).

De hecho, Sergio Torralba determina que “el efecto” que puede haber con "esa diferencia de calidad" entre las parejas que juegan a lo largo de la partida “es fácilmente compensado con las cartas que se pueden tener".

Alberto Planas: "El guiñote es un parchís disfrazado de ajedrez, porque el árbol de decisiones de los jugadores se ve que es muy limitado frente al árbol de combinaciones de juegos posibles”

El riguroso trabajo del universitario zaragozano determina que la pareja que lleva "el as y el tres" del palo que pinta “gana el 78,03% de las veces”. Y esta situación se produce casi en la mitad de las partidas revisadas, un 48,85%. Esa coyuntura es mucho más determinante que el conocimiento de este juego por parte de los jugadores.

Otra de las circunstancias concluyentes para el resultado final es cuando se cantan las 40: esto ocurre en 394.717 partidas, el 22,65% las analizadas, y determina que la pareja que las lleva gana en un 87,55% de las veces sucedidas. “Lo que demuestra es lo beneficioso que es tenerlas para el triunfo”, comenta Sergio Torralba.

Iván Pérez (izquierda) y Alberto Planas, de la Asociación Aragonesa de Guiñote, ayer antres de presentar el proyecto del guiñote como Bien de Interés Cultural en las Cortes de Aragón.
Iván López (izquierda) y Alberto Planas, de la Asociación Aragonesa de Guiñote, con el proyecto del guiñote como Bien de Interés Cultural.
José Miguel Marco

La importancia que supone para la pareja llevar el as ayuda a ganar el 65,96% de las partidas, mientras que si disponen el tres se traduce en el 61,39% de las posibilidades de éxito. “El hecho de que casi el doble de veces venza la pareja que tiene el as nos hace pensar en su gran importancia en el resultado final, aunque a priori no lo parezca”, incide Torralba.

Análisis de las partidas, lejos de Karpov

Al llegar a esa conclusión analítica, tras examinar los resultados de los 1,7 millones de partidas, el presidente de la Asociación Aragonesa de Guiñote, Alberto Planas, dice que “el guiñote es un parchís disfrazado de ajedrez” porque “el árbol de decisiones de los jugadores se ve que es muy limitado frente al árbol de combinaciones de juegos posibles”.

Agrega que en este juego de cartas tan seguido por los aragoneses “no hay un Anatoli Karpov ni un Garri Kasparov", en referencia a los campeones mundiales de ajedrez más seguidos, ya que “la mejor jugada de guiñote que te lleva a ganar la partida puede conseguirla un novato gracias al azar o la suerte”.

Así, la conclusión del trabajo es que los jugadores “tendemos a creer equivocadamente que nuestras decisiones y acciones en el guiñote valen mucho más de lo que en realidad son”. Planas reconoce que, a menudo, “una supuesta mala jugada o una equivocación, resulta mejor que la valorada como buena jugada”.

Alberto Planas: "Es importante saber gestionar la incertidumbre y eso comienza aplicando realmente la lógica de juego al que nos enfrentamos"

A la hora de ponerle nombre y apellidos a los sentimientos durante las partidas, el presidente reconoce que “el guiñote produce frustración a muchos jugadores porque no son capaces de entender y tolerar la dosis de azar que hay detrás de cada partida”. “Es importante saber gestionar la incertidumbre y eso comienza aplicando realmente la lógica de juego al que nos enfrentamos”, concluye el presidente.

Alberto Planas considera que “el azar en el juego suele tener un matiz peyorativo, pero al no ser el guiñote un juego de apuesta se convierte en elemento democratizador de un valor social incalculable, donde el pobre gana al rico y el necio al sabio”. Por ese motivo, agrega que “es ideal” para que jueguen “entre edades y géneros diferentes en condiciones de igualdad”.

Alfombra de serrín realizada hoy en Aguaviva en representación del guiñote.
Alfombra de serrín realizada hoy en Aguaviva en representación del guiñote.
Heraldo

La estrategia del juego 

A pesar de que la lógica interna de este juego de cartas es demoledora, el responsable de la Asociación Aragonesa de Guiñote completa que también tiene su estrategia, que debe basarse en la obtención de la máxima información posible que sea lícita sobre la partida en cada jugada (conteo de cartas y puntos).

Además los dos jugadores del mismo equipo deben usar "una misma estrategia pura por ambos" que sean "dominantes", "minimax o maximin”, según convenga la partida. Por eso, deben conocer el “metajuego” de los adversarios para saber cómo jugarles en contra. Y, sobre todo, hay que "conocer cómo se comporta el azar en el juego". Planas agrega que en esa actuación en las partidas "no se es nada intuitivo y no se puede dejar a la experiencia".

Alberto Planas: "El guiñote no es un juego de apuesta y el azar se convierte en elemento democratizador de un valor social incalculable, donde el pobre gana al rico y el necio al sabio

A la hora de comparar las dos caras del juego, el presidente señala que "la estrategia humana es como el sol", mientras "el azar es como las estrellas". "El sol bloquea las estrellas durante el día y los guiñoteros dormimos por la noche, por lo que no llegamos a ver las estrellas, a pesar de que haya un universo de ellas", concluye.

En los meses de verano es cuando más se juega a las cartas en Aragón y los miembros de esta asociación destacan los torneos más numerosos que organizarán en seis localidades aragonesas: Utebo, Calatayud, Barbastro, Huesca, Alcañiz y Teruel. Está previsto la presencia de 64 parejas en un evento que patrocinan Ambar, Embou y naipes Fournier. “Hemos llegado a celebrar torneos 'online' este verano con hasta 1.024 personas. Esta es la cuarta edición y funciona muy bien”, concluye Planas.  

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión