Elem: “Este verano he hecho un viaje muy especial con mi madre a Egipto y Jordania”
Laura Cebrián (Zaragoza, 1993), conocida artísticamente como Elem, defenderá su último disco, ‘Planeta de cristal’, en la próxima edición del FIZ, donde compartirá escenario con Cupido, Alizzz, Ginebras, Sidonie y Carlos Sadness.
¿Qué significa el verano para usted, qué le sugiere?El verano es pasar tiempo con mi familia en la playa, olor a crema solar, ir a la montaña, desayunar sin prisa, comer helado, leer mucho más, dormir profundo con la ventana abierta, carretera para ir a tocar, lugares nuevos donde canto mis canciones, festivales, farándula, atardeceres con amigas, comer con el pelo mojado, viajar, descubrir y conocer rincones nuevos, visitar los viejos, música.
¿Cómo lo vivía en su infancia y adolescencia?Solía quedarme casi todo el verano en el apartamento de mis abuelos en Salou, con mis primos y mi hermana. Es un lugar al que le tengo mucho cariño, porque tengo miles de anécdotas con mi familia, y sobre todo con mi abuela. No podían faltar los juegos de cartas nocturnos con su copita de Baileys, los paseos con un helado de la Ibense, los desayunos con vistas al mar y a mi palmera favorita…
¿Y en la edad adulta?Me gusta seguir sacando a la niña interna, así que sigo disfrutando de lo que más me gusta hacer, pasar tiempo con los míos, viajar todo lo que pueda para conocer lugares nuevos, pero también volver a visitar rincones que me inspiran. Por mi trabajo, el verano es un momento de recorrer kilómetros para hacer música en directo, una de las cosas que más me gustan.
¿Este año tiene o ha tenido tiempo para irse de vacaciones? ¿Adónde?
Este año ha sido especial, porque he hecho un viaje increíble con mi madre a Egipto y Jordania. Fueron 15 días intensos, en los que he aprendido mucho, la verdad. También he juntado algunos días para estar en la playa y, con mucha alegría, el resto se lo estoy dedicando a los conciertos que tengo en distintos festivales.
¿Cuál ha sido el viaje de verano de su vida?
Voy a elegir el verano de 2019, que estuve con mi hermana en Islandia. Sentí una conexión brutal con este lugar y su naturaleza. A las dos nos encanta andar por la montaña, y estuvimos en el paraíso. Después, ese mismo verano, estuve con mis amigas en Tarifa y ahí lo dejo, ja, ja, ja…
¿Cuál es su rincón de Aragón favorito para desconectar?
Mientras esté en el Pirineo, cualquiera es perfecto. Suelo ir a los valles de Tena, Ordesa, Benasque…
¿Qué destino vacacional tiene pendiente por cumplir?
Uff, tengo muchos, pero me encantaría Australia.
¿Recuerda alguna anécdota estival vinculada a su profesión o a las vacaciones?
Recuerdo cuando era pequeña y acompañaba a mi padre a algunos de sus conciertos de verano, y jugaba a que era su mánager y le sugería las canciones que tendría que cantar en el espectáculo.
¿Qué tipo de lecturas u otras actividades realiza estos días (conciertos, teatro, festivales…)?
Este año he aprovechado para quedarme unos días en las zonas donde he tenido mis conciertos para conocerlas mejor y para ver a otros artistas (muchos de ellos, compañeros y amigas), como en Jaca, en Sallent, en Villanueva de Gállego, o en Alcañiz, en el festival Aragón Sonoro.
¿Qué planes cumple de los que se propone cada verano: descansar, desconectar, crear..?
Si puedo hacer un viaje, se suele cumplir lo de desconectar, sobre todo si el viaje requiere intensidad de ver cosas. Y por supuesto, todos los veranos hay un espacio para componer nueva música.
¿Qué película, canción y/o concierto evocan un verano inolvidable para usted?
Cuando antes hablaba del año 2019 como uno de los veranos de mi vida, incluye también escuchar mucho flamenquito en directo, a la hora del atardecer en el sur con mis amigas.
