El Carlos Saura fotógrafo, honrado en una exposición que estará tres meses en la Lonja

La muestra, que auspicia PhotoEspaña, consta de 118 imágenes tomadas por el cineasta oscense

Anna Saura (en el centro, con vestido de color teja) salta más alto que nadie en la presentación de la muestra fotográfica de su padre en la Lonja.
Anna Saura (en el centro, con vestido de color teja) salta más alto que nadie en la presentación de la muestra fotográfica de su padre en la Lonja.
Francisco Jiménez

“Para Carlos Saura, la fotografía fue sobre todo un juego, una puerta abierta a la experimentación y la diversión”. Chema Conesa, profesional de la fotografía y comisario de la exposición ‘Carlos Saura fotógrafo: una vida tras la cámara’, explicaba así en la mañana de ayer la relación del cineasta oscense con el encuadre, el obturador y la inmortalización artística de instantes muy diversos, afición que mantuvo desde los 11 años hasta su reciente fallecimiento en febrero de este año.

La exposición mostrará hasta el próximo 10 de septiembre en la Lonja de Zaragoza 118 fotografías realizadas por Saura. La recopilación se basa en el trabajo documental del autor de ‘La prima Angélica’ y las visitas de Conesa a su residencia de la sierra madrileña, para bucear en los negativos y positivados que conservaba Saura. Inaugurada hace cinco años en Madrid, la muestra forma parte del calendario de exposiciones de PhotoEspaña en este 2023.

La presentación matinal de ayer contó con la presencia de la consejera de Cultura, Educación y Turismo, Sara Fernández, quien además de honrar a Saura tuvo un recuerdo para el fundador de PhotoEspaña y director de La Fábrica Alberto Anaut, fallecido hace unos días. Junto a ella estuvo Ana Berruguete, directora de exposiciones de La Fábrica; la hija de Carlos Saura, Anna Saura, y el mentado Conesa.

Todos los oradores hicieron hincapié en la bonita pugna que librarán las imágenes con el marco de la Lonja y sus techos, que las van a albergar y proteger los tres próximos meses. Por la tarde fue la propia alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, la que se acercó a la Lonja para la inauguración formal de la muestra.

La emoción del descubrimiento

Anna Saura miró arriba con deleite antes de afirmar que “mi padre estaría muy emocionado por ver sus fotos expuestas en este espacio tan maravilloso. El trabajo que hizo Chema Conesa con mi padre, una verdadera tarea de descubrimiento, fue muy bonito y le permitió reencontrarse con esos recuerdos inmortalizados, tan variados y ricos. La fotografía era su gran pasión, aunque siempre decía que apretar el obturador marcaba la llegada del pasado. En los últimos años de su vida, sin embargo, empezó a revisitar imágenes, aunque nunca lo hizo pensando que tuvieran valor”.

Conesa, por su parte, recordó la icónica visión de Saura con la cámara colgada en el cuello o al hombro. “De niño construyó su primera cámara; también fabricó sus propios objetivos más tarde. Era un hombre del Renacimiento: el cine, la música, la pintura, la escritura... Incluso dirigió una fábrica de motos. Aquí tenemos una exposición fotográfica pegada a su piel, a su vida; todo era fotografiable, desde una imagen tomada para probar un nuevo objetivo al recuerdo de un instante especial, un retrato único. Siempre estaba con la mente activa, haciendo cosas, y le encantaba disfrutar con todas ellas”.

Imágenes costumbristas tomadas por Saura en los 50.
Imágenes costumbristas tomadas por Saura en los 50.
Francisco Jiménez

La muestra está agrupada en cuatro áreas: primer laboratorio (foto casera, etapa de aficionado), Saura documental (viajes por España en los 50), fotógrafo cineasta (desde su ópera prima en largometraje ‘Los golfos’, de 1959) y universo Saura, con guiños a Buñuel, Storaro, su hermano Antonio y varias de la mujeres clave en su vida. También hay una pieza documental articulada sobre una larga entrevista con Saura.

Pasear por la exposición es un deleite, desde la anécdota a la cara conocida o la posibilidad de asomarse a realidades sociales de hace siete décadas. Paco de Lucía, guitarra en mano, con ManoloSanlúcar; Lola Flores comiéndose la cámara; una familia humilde granadina;Antonio Gades leyendo en la cama; Geraldine Chaplin y Rafaela Aparicio en ‘Mamá cumple 100 años’;López Vázquez en ‘La prima Angélica’;Buñuel de perfil, pensativo;los tambores de Calanda, Fernando Rey y José Antonio Bardem con Pío Baroja en el lecho de muerte del escritor... todo un cúmulo de emociones muy diferentes.

La muestra solo cierra los lunes. Los sábados y domingos de julio y septiembre habrá visitas guiadas y gratuitas a las 11.00. 

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