¿Por qué ha cambiado de color la estatua de los Premios Goya de este año?

Los Goya de este 2023 se han vivido entre reivindicaciones, outfits escandalosos y homenajes. Como no podía ser de otra manera, también se han estrenado no pocas novedades y una de ellas parece afectar a uno de los protagonistas indiscutibles de estas galas, sea la edición que sea. 

El tradicional cabezón que se entrega como galardón a los ganadores de cada edición de los Premios Goya está inspirado en el busto de pintor realizado por Mariano Benlliure en 1902, replicado a través de una reproducción de un vaciado en escayola original. El acabado final, metálico, se ha movido siempre en unas tonalidades grises y verdosas, como a medio camino entre el bronce y el níquel. 

Sin embargo, este año el Goya parecía más un premio de chocolate, al estilo de las figuras que se comen por Pascua, que un galardón de metal. La razón es que este año se han utilizado materiales sostenibles para la recreación de estas estatuas. 

Cómo se hace la estatua de los Goya

G.M.

La primera de todas las estatuas que se han ido entregando en estas 37 ediciones de los Premios Goya estuvo fabricada por el escultor malagueño Miguel Ortiz Berrocal en bronce. Representaba el busto de Goya con una cámara de cine, era diferente pues a la que se entrega en la actualidad, y pesaba casi 15 kilos. 

Ahora, la estatua de los Goya se realiza gracias a un molde de silicona que da forma a todas las copias. Este molde se rellena de cera y se deja secar, construyendo así la base del sobre la que se replicarán todas las copias necesarias para cada edición de los Goya. No faltan, obviamente, los retoques manuales de molde y estatua, una vez extraída después de cada proceso y paso por la fundición. 

Unos premios Goya más sostenibles

El material que se usa y se ha usado en esta edición para crear cada Goya ha sido bronce, pero este año el material ha sido reciclado. Este hecho ha sido el que le ha dado ese novedoso color marrón y el que ha despertado las dudas del público, presente y online, a través de las redes sociales. 

La edición 37 de los Premios Goya ha buscado ser más sostenible que nunca, desde el material de los galardones hasta la política de cero plásticos de un solo uso durante la gala. Igualmente, el cáterin posterior ha servido productos de proximidad, se han dispuesto fuentes de agua para evitar las botellas, los materiales de la alfombra azul y el photocall eran reciclados y, en esta línea, se han dispuesto diversos puntos de reciclaje en el recinto.