Cinco monumentos aragoneses entran en septiembre en la Lista Roja del Patrimonio
Uno de ellos, la Torre de los Condes de Bureta en Pleitas de Jalón, que es Bien de Interés Cultural, vuelve a la nómina después de abandonarla en 2018
Malos tiempos para los monumentos históricos aragoneses. El mes de septiembre se va a cerrar con cinco edificios más en la Lista Roja del Patrimonio que elabora Hispania Nostra. Una cifra que supone un récord ya que solo ha sido superada por el mes de diciembre de 2007 cuando, al poco de abrirse la lista, se produjo el aluvión inicial: en aquel mes entraron 22 monumentos. Desde entonces a hoy, solo ha habido un mes con otros cinco ingresos en la nómina de la vergüenza. Y ha sido en junio pasado. Sintomático.
El caso que quizá sea más sangrante es el de la Torre de los Condes de Bureta, en Pleitas de Jalón. El torreón, único en la comunidad autónoma aragonesa, es de estilo mudéjar y está datado en el siglo XIV. Tiene la categoría de Bien de Interés Cultural. Se construyó en ladrillo macizo sobre bloques de piedra reaprovechando los restos de una torre de época islámica, de entre finales del siglo IX y principios del X. Perteneció a la Orden de San Juan de Jerusalén.
Su caso es especialmente sangrante porque ya entró en la Lista Roja en el año 2007. Como amenazaba ruina, se iniciaron obras de restauración que sellaron las grietas, consolidaron el interior y colocaron una nueva cubierta. Una placa en su fachada recuerda hoy que la restauración la acometieron el Ayuntamiento de Pleitas y los ministerios de Cultura y Fomento, con cargo a 1% cultural. Las obras le valieron abandonar la Lista Roja en 2018, pero apenas tres años más tarde vuelve a ella. Según Hispania Nostra, "el exterior de este BIC contrasta nítidamente con el total abandono y falta de mantenimiento que sufre su interior". La organización de defensa del patrimonio denuncia "grietas diversas, claramente apreciables", "gran acumulación de guano en su pavimento y muros, así como basura varia", "acceso incontrolado al edificio por carecer su única puerta de hoja u hojas" y un aspecto general "de provisionalidad, precariedad, suciedad y abandono".
Aragón tiene 83 bienes en la Lista Roja, 44 en la provincia de Zaragoza, 9 en la de Teruel, y 33 en la de Huesca. En Zaragoza se ubican también otros dos nuevos ingresos: la Casa Modernista de Bulbuente y el Monasterio de Santa Susana de Maella.
La Casa Modernista es un edificio construido en mampostería junto a la carretera N-122, a las afueras de Bulbuente, donde en tiempos se la conocía como 'Villa Concha'. El edificio, de tres plantas, posee una espléndida rejería y tuvo bellas decoraciones en yeso hoy en buena parte perdidas. Hispania Nostra destaca que su estado de conservación es "pésimo". "Prácticamente se han desprendido todos los motivos ornamentales de la fachada y gran parte del revestimiento".
Por su parte, el Monasterio de Santa Susana de Maella acumula ya varios siglos de abandono. De probable origen visigodo, reconstruido por la Orden de Calatrava en el siglo XIII, sufrió destrucciones de distinto calado en los siglos XVI y XVII, alojó en el XVIII a monjes trapenses galos que huían de la Revolución, para acabar siendo saqueado y gravemente dañado en la Guerra de la Independencia. La Desamortización de Mendizábal (1835-1837) acabó dejándolo vacío y abandonado, cuando llegó a estar habitado nada menos que por 90 monjes. Aunque han sobrevivido elementos de interés, Hispania Nostra señala que está "en avanzado estado de ruina" y avisa: "Si no se actúa pronto, corre el riesgo de colapso".
El Castillo del Cid de Fortanete, que ha llegado a ser considerada "la joya oculta del Maestrazgo" turolense, ha entrado también en la nómina este mes de septiembre. No está claro que sea contemporáneo al Cid, aunque es anterior a 1194, fecha en la que aparece mencionado en un documento. Ubicado a unos seis kilómetros de la localidad, seguramente perteneció a la Orden de San Juan del Hospital hasta el siglo XIX. Fue ocupado por las tropas carlistas y escenario de escaramuzas con los liberales, según Hispania Nostra.
De su antiguo esplendor quedan un muro de mampostería y tres torreones huecos por dentro, uno de ellos de seis metros de altura. "Estado de ruina", concluye Hispania Nostra, que, además, asegura que la próxima construcción de un parque eólico a menos de dos kilómetros de distancia acabará por afectar a la construcción.
Por último, de la provincia de Huesca ha ingresado en la Lista Roja la ermita de Santa Clara de Puycremat, en el término municipal de Graus. Se tiene muy poca información documental de ella porque los archivos de la zona fueron quemados durante la guerra civil. Es de una nave, con ábside semicircular, con cubierta de losas y pavimento de cantos rodados haciendo dibujos. "El altar fue desmontado y el ara yace por el suelo", destaca en su informe Hispania Nostra, al tiempo que alerta: "Una amenazadora grieta recorre de arriba abajo el muro oeste entre la espadaña y el muro sur. El engarce del ábside con el muro sur también se está abriendo. En la cubierta ya hay una abertura y las goteras están afectando al inmueble, mientras el interior está completamente abandonado y descuidado".
