Los bolsos de París/64 salen al encuentro de las clientas en Zaragoza

El pasado mes marzo dejábamos a los zaragozanos María Alfonso y José María Pozas, de Paris/64, paladeando el sabor del éxito, asistiendo al crecimiento exponencial de su marca de bolsos y complementos. Lo celebraban con un sentimiento que mezclaba la sorpresa de ver cómo una idea propia destaca en el competitivo mundo de internet con la certeza de saber que es el fruto de un trabajo bien hecho y de una pasión bien encauzada.

En estos meses pandémicos, esa pasión ha traspasado la virtualidad del mercado 'online' y, a la vez, se ha nutrido de él. París/64 ha establecido una suerte de comunidad con sus clientas, devotas de sus bolsos que combinan audacia y clasicismo: "En la web (que acaba de ser renovada) tenemos un chat y ahí contestamos a todas las dudas de las clientas", cuenta María. Y no solo. Porque ese espacio hace las veces de consultorio, de rincón para la expresión de deseos e ilusiones. A ese hilo emocional responde en gran parte el paso adelante de la marca: añadir a su negocio en internet una tienda física.

La idea es ya realidad en el número 16 del paseo de la Constitución de Zaragoza, donde desde hace poco más de una semana hay una puerta abierta al universo intemporal y glamuroso, también muy reconocible, de Paris/64.

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El espacio nace sobre todo como punto de encuentro con los clientes, una respuesta al cariño recibido en las redes, un lugar en el que la conversación a través del móvil pueda pasar a ser cara a cara y, también, en el que se puedan ver y tocar los diseños. Un contacto piel con piel, que podría decirse casi literal, porque en la boutique hay hasta muestras de los cueros y antes con los que se fabrican los accesorios. "La gente quiere venir, quiere ver, lo que nosotros queremos ofrecer es una experiencia", explica María. Y precisamente, la experiencia hasta el momento confirma esa impresión: "Si bien hay gente que pasa y al ver el escaparate entra, la mayoría de los que se acercan ya nos conocía".

"Para acompañar el crecimiento de la marca abrimos un 'showroom' en Zaragoza", cuenta María. "En poco tiempo teníamos la agenda de citas llenísima, así que pensamos que quizá lo mejor era abrir directamente una tienda".

La decoración: materiales de calidad

El local es un reflejo de los puntales de París/64, con la calidad de los materiales en primer término. En la decoración domina el microcemento de las paredes, en coordinación con el hierro y el cuero del que están hechas las mesas expositoras. El entorno ayuda a que destaquen los diseños, en particular, el buque insignia de la marca: el bolso 'prismatic'. El modelo inspira incluso la forma ovalada de las mesas.

A los bolsos y cinturones -fabricados en Ubrique-, se añaden zapatos (hechos en Alicante), un perfume y una, de momento, pequeña y selecta colección de ropa, que se cose en Zaragoza. Es esta la que en la nueva temporada va despegar, anuncian María y José María. De hecho, una parte ya está agotada a través de peticiones 'on line', sin que ni siquiera haya llegado a la tienda. Pero hay (y habrá) mucho más. "La categoría de ropa va a crecer mucho", con camisas, blazers y unas "espectaculares" chaquetas de lana, todo en ediciones limitadas.

El local de París/64 tiene vida también en la trastienda, donde se encuentra el cuartel general de la firma, cuyo equipo ha pasado de los dos fundadores a nueve personas.

En el horizonte, más novedades. Ya mismo, un nuevo modelo en la familia de bolsos París/64: el Windsor. Para el año que viene, la firma quiere abrir otra sucursal en Madrid, uno de los lugares donde más populares se han hecho sus creaciones. Y preparan también una colección benéfica, de la que informarán próximamente, en sintonía con los valores de la marca, que destina un euro de sus ventas a la ONG Cooperación Internacional, con la que colaboran también en diversas actividades.