ferias
Los artesanos afrontan el futuro con esperanza tras seis meses de parón
El antiguo Matadero de Zaragoza acoge este fin de semana una feria para el despegue de la artesanía aragonesa.
El antiguo Matadero de Zaragoza acoge este fin de semana una novedosa feria organizada por la Asociación de Artesanos de Aragón y el Gobierno de Aragón, con la que el sector pretende escenificar la vuelta a la normalidad tras un largo parón de seis meses motivado por el invierno y la crisis sanitaria. Es una feria muy experimental, que ha comenzado este sábado y concluirá este domingo, a las 14.00, con dos jornadas diseñadas para combinar arte, compras, ocio y gastronomía.
Susana Martín, presidenta de Artesanos de Aragón, se mostraba muy satisfecha de la respuesta del público en la jornada de apertura. "Es la primera vez que hacemos esta experiencia piloto en el Centro de Artesanía de Aragón y está viniendo mucho público, pero como el espacio es tan grande y todo está muy bien calculado y distribuido, fluye todo a la perfección", señala.
"Los artesanos están contentos porque ven que con esta experiencia las ventas comienzan a moverse. Hacemos esto para que haya un balón de oxígeno, llevamos seis meses sin ingresos. Durante el invierno estamos en los talleres produciendo y en primavera comenzamos a salir, pero este año ha coincidido con la pandemia y no se ha podido hacer ninguna feria de las muchas que había en primavera", añade Susana Martín.
Los artesanos consideran que esta feria puede ser una prueba piloto que señale por dónde va a ir el futuro. "Como en todos los sectores, el futuro está complicado. Es verdad que somos un sector que ha sobrevivido a muchas crisis, somos pequeños productores, de los que muchos viven en núcleos rurales, con lo cual la forma de vida es algo más fácil. Pero si se reduce la actividad y baja el consumo, lo tenemos también difícil porque somos vendedores de artesanía, que es arte al fin y al cabo, y permite que llevemos algo o tengamos algo en casa que nos diferencie de los demás. Es una característica que nos ha distinguido desde la prehistoria. Hay productos artesanos que son muy útiles y muy prácticos y que se pueden adquirir a buenos precios. Estamos satisfechos porque el público está pensando en ayudar", comenta la presidenta de la asociación.
En las instalaciones del antiguo Matadero se reúnen una veintena de artesanos de todas las disciplinas: joyería, textil, cerámica, artes gráficas, esmalte a fuego, cestería y madera. Ellos mismos están impartiendo talleres para los visitantes. El de cestería tiene gran éxito entre los más pequeños, que se marchan con un pequeño cesto hecho durante la clase. También el de cerámica ha estado muy concurrido.
Para este domingo por la mañana, está el ofrecido por Sercoser, ‘Taller para coser un minimonster’, y el de Koko-Soko, para hacer una pulsera de margaritas con la técnica miyuki.
Uno de los puestos más frecuentados es el de Cerámicas El Cierzo, que presenta en sociedad una jarra botella de arcilla que refrigera el agua por métodos naturales, a la que han bautizado como ‘refresquera’, y que puede ser de mucha utilidad para estos meses de calor.
Además, a todos los visitantes a la feria, cuya entrada es gratuita, se les entrega un folleto para disfrutar de ofertas en varios establecimientos hosteleros de la zona, a base de tapas y consumiciones a precio cerrado. En esta experiencia han participado de forma activa la Asociación de Cafés y Bares y los establecimientos Castrobar Vermutería, bar Maram, Bistrónomo, Son de Luz y bar Axpe. Todos han preparado creaciones que oscilan entre los 4 y los 9 euros, con tapas variadas y bebida para acompañar.
Para acceder a sus ofertas es suficiente con pasar por el antiguo Matadero y coger uno de los folletos que facilita la organización a todos los asistentes. La idea, según Susana Martín, es que las personas que se acerquen a la feria concluyan la jornada tomando una consumición por la zona, iniciativa con la que también se contribuye al despegue del sector hostelero del barrio, actividad que también ha sido muy castigada por la pandemia sanitaria.
