Ánchel Conte: "La palabra es el medio con el que se nombra y define lo que se ama"

Publica ‘Luna que no ye luna / Luna que no es luna’, en bilingüe, poesía amorosa y carnal

Conte es un clásico del aragonés contemporáneo.
Ánchel Conte: "La palabra es el medio con el que se nombra y define lo que se ama"
IGNACIO BARROSO

¿Podríamos definir el poemario como una sinfonía del amor en cinco tiempos?

Sí, puesto que cinco son las partes que corresponden a cinco estados de ánimo, partiendo de lo deseado para terminar en la plenitud de lo alcanzado. Esta ha sido la visión que ha tenido Antonio Pérez Lasheras, que es quien seleccionó, ordenó y agrupó los poemas que le envié, que superaban los 200, hasta dejarlos en 74.


Explíquenos esas fases: deseo, ausencia, tardes y noches, palabras y plenitud. 

El deseo es la constante que nos empuja hacia lo amado pero que no es sino una idea nacida de la necesidad de amar; la ausencia es la consciencia de que lo amado existe pero no se tiene; las tardes que se hacen noches son el tiempo en el que lo amado late en el ocaso que se oscurece a la espera del alba del encuentro; la palabra es el medio –como podría ser la música o el tacto– con el que se nombra y define lo que se ama; plenitud es el gozo del encuentro con lo amado.


¿En qué consiste el milagro de la palabra? 

El poema no es una palabra, sino una colección de sentimientos encarnados en palabras que necesariamente han de ser muchas o algunas porque falta esa palabra exacta capaz de definir lo que sientes. Por otro lado, sin palabras es difícil amar; tanto el amado como el amante necesitan decir y oír, y al escribir sacas lo que llevas dentro y le das forma de palabra, o de poema cuando la palabra queda corta.


¿Qué ha pasado por su cabeza y su corazón mientras escribía el libro? 

El libro recoge poemas que van de la primavera de 2011 a 2013. Hay escritos sobre borradores anteriores, y así se hace constar. Amor y desamor, ausencia y presencia, tener y no tener, pero siempre desear… Todo eso andaba por la cabeza y el corazón, y el lector podrá percibirlo con nitidez. 


¿Es el amor la medida de todo?

No hay amante sin amor, pero sí puede haber amor sin amante, de modo que la verdadera medida es el amor, y lo es total cuando éste se encarna en una persona.


Cito dos versos de poemas diferentes: «tu nombre tú mi amor» y «caso esta noche sueñe que me abrazas». ¿Es esto romanticismo sin más?

La palabra romanticismo tiene muy mala prensa, pero a mí no me asusta. Esos dos versos están hablando de amor, es poesía amatoria, es algo más que una forma poética, que sería el romanticismo sin más; esos dos poemas nos hablan de un estado de ánimo, de un momento de amor… Es más que literatura.


¿Ha querido hacer una exaltación del cuerpo?

Sí, efectivamente, es un libro muy carnal, muy físico. El cuerpo encierra el espíritu del ser amado, por eso hay que darle el valor que le doy en mis poemas. Y también el propio cuerpo, que es el que siente.


¿Tenía a otros poetas en la cabeza? Pienso en Cavafis, en Cernuda, en Gil de Biedma...

No, no pensaba en otros poetas, pero con cualquiera de los que menciona coincido en la exaltación del cuerpo, en una forma de entender el amor.


¿Por qué expone tanto? 

Cuando escribo lo hago para mí, me desnudo delante de mí mismo para encontrarme y reconocerme, no me avergüenzo de mis sentimientos y por eso pueden parecer incluso impúdicos... 


¿Cómo está el aragonés con el gobierno de coalición PP-PAR?

Pues el aragonés está inexistente, porque hasta el nombre le han quitado, y aquello que no tiene nombre no existe. Podrán decir lo que quieran, pero hay una clara voluntad de ignorar la realidad, la del aragonés y la del catalán de Aragón.