La mayoría de españoles rechaza el pacto con EH Bildu y un 58% lo ve como un pago por la investidura

El acuerdo entre PSOE y Bildu para arrebatarle a UPN la Alcaldía de Pamplona ha desencadenado un terremoto político en la capital navarra que ha traspasado las fronteras de la comunidad foral. La mayoría de españoles se opone a la moción de censura pactada entre los socialistas y la izquierda abertzale, según una encuesta elaborada por el Instituto DYM para HENNEO, de la que se desprende que el cambio no convence ni siquiera a los votantes del PSOE. La maniobra es vista mayoritariamente como un pago a cambio del apoyo de Bildu a la investidura de Pedro Sánchez.

Casi uno de cada dos encuestados rechaza el pacto fraguado entre PSOE y Bildu, una proporción muy por encima del 23,8% que apoya el volantazo a la izquierda en la Alcaldía de Pamplona. De hecho, preguntados por su opinión acerca de esta maniobra, son más incluso los entrevistados indecisos que no saben o no contestan (27,2%) que los partidarios del cambio. La formación liderada por Sánchez y la coalición coordinada por Arnaldo Otegi pactaron hace una semana presentar una moción de censura para desalojar del Ayuntamiento de Pamplona a Cristina Ibarrola y colocar en su lugar al portavoz municipal de Bildu, Joseba Asiron.

El rechazo a la entrega de Pamplona a la izquierda abertzale es mayoritario no solo entre el electorado de derechas sino también entre los votantes socialistas, aunque con matices. Mientras que, en el caso de Vox y PP, un amplio 86,9% y 78,6% de los entrevistados que dieron su apoyo a Abascal y Feijóo respectivamente en las pasadas elecciones generales se opone al pacto de PSOE y Bildu, entre los votantes socialistas la proporción de entrevistados que rehúsan la maniobra cae hasta el 36,7%.

Aun así, incluso entre el electorado socialista, son más los detractores que los partidarios del acuerdo con Bildu. Tan solo uno de cada tres votantes del PSOE se muestra a favor de la moción. Únicamente aquellos que respaldaron en las urnas a Sumar amparan mayoritariamente la vuelta de Bildu a la Alcaldía de Pamplona: el 46,1% lo apoya, frente a un 25,2% que lo rechaza. Tanto en el electorado de Sumar como en el del PSOE destaca el abultado porcentaje de entrevistados que opta por el ‘no sabe o no contesta’ como respuesta (28,7% y 29,8% respectivamente).

Vinculado a la investidura

Además, el 58,5% de los entrevistados considera que la moción de censura a Ibarrola es una de condición impuesta por Bildu a cambio de su apoyo a la investidura de Sánchez, una opinión que es compartida de forma mayoritaria por todos los electorados. En concreto, el 89,3% de los votantes de Vox y el 78,5% de los del PP establecen una vinculación directa entre ambos hechos, así como el 57,7% de los electores del PSOE y el 44,2% de los de Sumar.

De nuevo una proporción importante de votantes de izquierdas (el 30,1% de los electores de Sumar y el 22,3% de los del PSOE) se muestran indecisos a la hora de definir su opinión respecto a la relación entre la moción de Pamplona y la investidura de Sánchez. De hecho, en ambos casos son más los encuestados que no dan una respuesta concreta que los que niegan que la maniobra producida en la capital navarra responda a un pago a Bildu por facilitar la reedición del mandato de Sánchez. Solo un 25,7% de los entrevistados que eligieron la papeleta de Sumar el pasado 23 de julio y un 20% de los que se decantaron por la del PSOE rebaten dicha relación, así como un 13,7% de los electores del PP y un 4,8% de los de Vox.

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El apoyo de Bildu fue clave para posibilitar un nuevo Gobierno liderado por Sánchez, aunque en su momento no trascendió ningún acuerdo entre socialistas y abertzales. Apenas un mes después de la investidura, Feijóo considera que la maniobra de Pamplona es la "primera factura" pagada por el PSOE a Bildu, mientras que los socialistas niegan que el pacto se produjera antes de la reelección de Sánchez y lo defienden como una fórmula para desbloquear el que consideran que es «un Ayuntamiento paralizado» con un equipo de gobierno «incapaz de llegar a acuerdos con nadie», dado que UPN gobierna enminoría. 

El 40% cree justificada la ruptura entre Podemos y Sumar

Una gran parte de los españoles creen que la salida de Podemos del grupo parlamentario de Sumar en el Congreso y su inclusión en el grupo mixto está plenamente justificada. Así lo refleja el barómetro de diciembre elaborado por DYM para HENNEO, que revela que, sin embargo, la opinión mayoritaria entre los votantes de la coalición de Yolanda Díaz en las últimas elecciones es justamente la contraria: más de la mitad (el 54,1%) rechaza el movimiento de los morados y solo el 33% lo considera justificado.

Sumar es el único de los principales partidos a nivel estatal con una mayoría de electores que consideran que la decisión de Podemos de dejar el grupo parlamentario e iniciar un camino en solitario en el Congreso no es razonable. Incluso una mayoría de los votantes del PSOE, socio de coalición de Díaz, creen que el partido morado tenía razones suficientes para romper: así lo piensan un 38,9% de los encuestados que votaron al PSOE en julio, mientras un 36,3% opina lo contrario.

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Entre los votantes de la derecha, el respaldo a la decisión tomada por el partido liderado por Ione Belarra es mucho más claro. El 41,9% de los electores de Vox y nada menos que el 60% de quienes eligieron la papeleta del PP en las últimas generales piensan que la salida de Podemos del grupo parlamentario de Sumar está justificada, y tan solo un 17,6% de los votantes del PP rechazan el paso dado por los morados.

Las tornas se invierten cuando se pregunta a los encuestados si el Gobierno que acaba de conformarse debía haber incluido algún ministro de Podemos. La derecha, como era previsible, lo rechaza de forma muy mayoritaria, pero lo más llamativo es que, entre los electores de Sumar, hay una mayoría que piensa que los morados debían haber mantenido al menos un ministerio. Así lo cree un 44,9%, por el 40,5% que piensa que Yolanda Díaz ha hecho bien dejando a Podemos fuera del Consejo de Ministros. Un 31,7% de los electores del PSOE, por su parte, deseaban que los morados siguieran en el Ejecutivo, aunque el 50% lo rechaza.

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Lo que genera muchas menos dudas a los encuestados es una posible vuelta a la política del exvicepresidente del Gobierno Pablo Iglesias. Tan solo el 14,4% de ellos se muestra favorable, por un 62,2% que lo rechaza. Y ni siquiera entre los votantes de Sumar hay una mayoría que desea ver de nuevo a Iglesias en la política activa: solo el 34,1% vería bien la vuelta del exlíder de Podemos, por un 43,7% que rechaza esta posibilidad. Ese porcentaje supera el 55% en el caso de los votantes del PSOE y es de más del 80% si se toman como referencia los votantes de los partidos de la derecha –PP y Vox–.

Ficha técnica