La Policía Judicial investiga el incendio con tres muertos en una residencia de Burgos
El resto de los ancianos que se encontraban en el centro, cerca de 40, han sido realojados temporalmente en otras instalaciones.
La Policía Judicial investiga las causas del incendio en una residencia de Celada del Camino (Burgos) en el que fallecieron este domingo por la tarde un anciano de 72 años y una mujer de 88, mientras que otra residente, de 76 años, murió durante el traslado al hospital, según ha informado el delegado territorial de la Junta en Burgos, Roberto Saiz.
Ha explicado que el resto de los ancianos que se encontraban en el establecimiento, cerca de 40, han sido realojados temporalmente en otros centros, la mitad de ellos en residencias dependientes de la Diputación provincial de Burgos.
Por su parte, el jefe del Parque de Bomberos de Burgos, Miguel Ángel Extremo, ha afirmado que cuando llegaron a la residencia, situada a unos 20 kilómetros de la capital de provincia, el fuego estaba casi extinguido y ha advertido que había en el inmueble pocos elementos inflamables, aunque la mayoría eran materiales sintéticos y generaron una gran cantidad de humo, que pudo ser la causa de los fallecimientos, como ocurre en la mayoría de los incendios, en los que las llamas no suelen provocar la mayoría de los daños personales.
Los expertos están revisando las instalaciones dañadas de la residencia privada, aunque con varias plazas concertadas con la Junta de Castilla y León, para determinar su estado, posibles reparaciones y, sobre todo, si el fuego ha llegado a dañar su estructura, por lo que "en este momento no se puede precisar cuándo volverá a funcionar", lo que también dependerá de sus propietarios.
El incendio se registró este domingo por la tarde en la residencia Domus VI situada en la localidad burgalesa de Celada del Camino.
Según indicó la subdelegación del Gobierno en Burgos a través de un comunicado, la investigación de los hechos se encuentra "judicializada", y la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Burgos realizó en el primer momento una inspección técnico ocular.
A continuación, solicitó la colaboración de los especialistas del equipo de investigación de incendios de la Guardia Civil, para intentar determinar las causas del incendio.