coronavirus
Torra ordena el cierre total de Cataluña: 7,5 millones de habitantes confinados
El presidente de la Generalitat pide ayuda a Pedro Sánchez para aplicar una medida drástica para la que no tiene las competencias.
Hacía días que desde el independentismo pedían a Quim Torra que diera un puñetazo en la mesa y dejara de hacer seguidismo de las políticas anunciadas por el Gobierno central frente al coronavirus. Le pedían que se anticipara a Pedro Sánchez. Horas después de que se lo reclamara la Asamblea Nacional Catalana, el presidente de la Generalitat anunció este viernes, en una rueda de prensa a última hora, su intención de confinar a toda la población catalana, como ya hicieron las autoridades de Lombardía en Italia o el propio Govern catalán puso en marcha a pequeña escala en la localidad de Igualada (Barcelona).
Torra anunció su intención de cerrar por completo Cataluña para evitar el "colapso del sistema sanitario", pero al mismo tiempo pidió ayuda a Pedro Sánchez, con quien habló por teléfono durante la tarde, para poder poner en marcha la medida más drástica de cuantas ha adoptado el Gobierno catalán. "Es el momento de frenar, es el momento de confinarnos. Quiero agradecer la ciudadanía de Cataluña el esfuerzo que está haciendo", afirmó.
Torra se anticipaba así a la puesta en marcha este sábado, tras un Consejo de Ministros extraordinario, de la declaración oficial del estado de alarma para todo el territorio español. "Creemos que hay que confinar toda Cataluña. Os pido este esfuerzo, hay que dar un paso adelante para autoprotegernos", emplazó a la ciudadanía. Se trata de un anuncio más simbólico que efectivo, en tanto en cuanto la Generalitat catalana no tiene las competencias para decretar el cierre absoluto de la comunidad catalana. Así, hay atribuciones clave como los aeropuertos, los puertos, las vías férreas, las autopistas del Estado y las fronteras, que si se quieren cerrar, dependen al final del Gobierno del Estado.
Por ello, Torra trasladó a Sánchez que le ayude a aplicar el 'cerrojazo' a toda la comunidad. "Podemos decretar el confinamiento de Cataluña, pero necesitamos la colaboración del Estado en las infraestructuras que son de su competencia", expresó. "Aún no hemos recibido una respuesta", señaló. Se trata de un gesto político, que a la vez puede forzar a Sánchez a adoptar esta medida para toda España, como ya han hecho otros socios europeos. También es una señal para instar a la ciudadanía a que se quede en casa en lo posible, horas antes de la declaración formal del estado de alerta por el Ejecutivo central.
Guiño reivindicativo
Se trata de un gesto que busca visualizar que Cataluña no tiene todas las competencias. Un guiño reivindicativo. Y un mensaje en clave interna secesionista: si Cataluña fuera independiente, el Govern ya habría actuado y no tendría que estar al rebufo de los anuncios de la Moncloa. Hasta la fecha, Torra siempre había comparecido acompañado de algunos de sus consejeros. Pero el viernes salió solo.
Tras la comparecencia del dirigente nacionalista, desde el Govern catalán reconocían que no tienen las competencias y hablaban de confinamiento "solidario". Dicen que hace falta que el Estado colabore y, en cuanto lo haga, Cataluña estará preparada para cerrarse al 100%. "Pido a todos los ciudadanos, jóvenes, mayores, pequeños y viejos, que eviten hacer ningún viaje ni ninguna actividad que no sea absolutamente imprescindible. Es un esfuerzo que nos ayudará a luchar contra la pandemia", dijo Torra.
El presidente de la Generalitat también anunció que este sábado participará en la conferencia de presidentes autonómicos que ha convocado Pedro Sánchez. Su posición la dejó clara el viernes, en su comparecencia ante la prensa. Hacía días que en el entorno del Gobierno catalán se criticaba, por ejemplo, que el Ejecutivo central no hubiera decidido ya el confinamiento para toda la Comunidad de Madrid.
Aumento de casos
El Govern anunció el viernes la medida más contundente hasta la fecha, después de que en las últimas horas se dispararan los casos de coronavirus en Cataluña. En solo un día, el número de afectados aumentó en 190 casos hasta los 509, una cifra, no obstante, que está todavía lejos de los casi 2.000 de la Comunidad de Madrid.
Un total de 35 de los infectados en Cataluña están graves y seis personas han perdido la vida, tres de ellos en el brote detectado en Igualada. Cataluña pasó el jueves a la fase de emergencia 1, tras haber pasado el día anterior al nivel de alerta. Además, tomó dos medidas de calado, cerrar los centros educativos y también decretar el confinamiento de Igualada.
