La movilidad por carretera ha sido la principal afectada en las primeras horas de protestas independentistas por la celebración del Consejo de Ministros en Barcelona, con decenas de cortes en toda Cataluña, mientras que los servicios de transporte público han funcionado con normalidad.

Desde primera hora de la mañana se han registrado afectaciones intermitentes en carreteras de las cuatro provincias catalanas, pero especialmente de Barcelona, donde miembros de los autodenominados Comités de Defensa de la República (CDR) han cortado vías y han llevado a cabo marchas lentas.

Algunas de las carreteras afectadas por estas protestas han sido la Ronda Litoral (B-10) y la de Dalt (B-20), la C-58 en el Vallés; la AP-7 en La Ampolla (Tarragona), la autovía A2 en Alcarrás (Lleida), la C-31 en Verges (Girona), la C-32 en Esplugas de Llobregat (Barcelona), la C-25 en Camplloch (Girona), la N-II en Figueres (Girona) o la B-23 en San Juan Despí (Barcelona).

Para cortar el tráfico, los CDR han invadido la calzada y en algunos casos han quemado neumáticos o han colocado troncos de árboles cortados, lo que ha causado importantes retenciones en algunas carreteras.

La actuación de los grupos independentistas también ha provocado cortes de tráfico en algunas vías importantes de la ciudad de Barcelona, como la avenida Meridiana, uno de los principales accesos a la capital catalana, que se ha visto afectada por interrupciones de tráfico en diversos momentos de la mañana.

Asimismo, varias concentraciones independentistas han cortado la avenida Diagonal con el Paseo de Gracia, la Gran Vía a la altura de la calle de Llacuna o la avenida Paralelo, donde se han producido las primeras cargas de la policía catalana contra manifestantes independentistas.

Ante el anuncio de movilizaciones de los CDR, la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona ya recomendaron ayer que hoy viernes se limitaran los desplazamientos en vehículo en el área metropolitana y que se utilizara el transporte público, que hasta hora funciona con total normalidad.

Así, los servicios mínimos decretados en la compañía ferroviaria Renfe, donde CGT ha convocado una jornada de huelga en toda España, se cumplen con normalidad y los trenes de cercanías y regionales de Renfe, agrupados en Rodalies de Cataluña, funcionan al 66 % en horas punta.

La movilidad de viajeros de los trenes de Larga Distancia Convencional y Alta Velocidad se asegurará con un servicio del 78 % de los trenes afectados, y de un 65 % en el caso de los Avant.

También el transporte público en Barcelona ha funcionado desde primera hora de la mañana con normalidad, sin que se hayan producido alteraciones por la actuación de grupos independentistas ni en el metro ni en la red de autobús.