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Pedro Sánchez pide la dimisión de Trillo y Pujalte porque su actividad privada ha sido "ilegal"

Desde el PP, Rafael Hernando defiende que "ser diputado no implique renunciar a su profesión"

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, cree que el embajador en Londres, Federico Trillo, y el portavoz de Economía del PP, Vicente Martínez Pujalte, "tenían que haber abandonado sus puestos ayer mismo" tras desvelarse que compatibilizaron su escaño con una actividad privada que, a su juicio, es "ilegal".


En una entrevista en Cuatro, Sánchez ha avanzado que el PSOE va a remitir a la Comisión del Estatuto del Diputado un escrito para que se pronuncie sobre el caso de ambos dirigentes 'populares', convencido de que es distinto al de otros parlamentarios que compatibilizan actividades.


El despacho de Trillo y el de Pujalte fueron contratados, sucesivamente, por la empresa Corporación Llorente para que realizasen trabajos de asesoría. El despacho de Trillo cobró 354.000 euros entre 2006 y 2008 y el de Pujalte 75.000 entre finales de 2008 y 2009, una época en la que ambos eran diputados de la oposición. "Despachos del PP, diputados del PP, Administración del PP, corrupción del PP", ha resumido Sánchez.


Así, ha negado que el 75 por ciento de los diputados estén en una situación similar, porque no están "inmersos en una causa" como, según ha dicho, están Trillo y Pujalte, ya que su caso ha emergido a raíz de una investigación de Hacienda.


El líder socialista ha querido desvincular el debate sobre las incompatibilidades de los parlamentarios de este caso concreto, porque se trata de "dos diputados del PP" que tienen despachos que han sido contratados por una empresa que está "siendo investigada por la Agencia Tributaria (AEAT) en relación con el supuesto pago de comisiones irregulares para adjudicarse contratos eólicos" de una Administración en manos del PP, la Junta de Castilla y León.


Sánchez, que obligó a todos los diputados socialistas a dedicarse exclusivamente a la tarea parlamentaria, ha insistido en que no le importa que los diputados den clases en la Universidad sin cobrar, pero que eso es muy distinto a tener un despacho de abogados y contratar con una empresa investigada por Hacienda por sus contratos con la Administración.


Mientras, el portavoz del Partido Popular en el Congreso, Rafael Hernando, ha insistido este viernes en que su opinión personal es defender que "el hecho de ser diputado no implique que tengas que renunciar a tu profesión", respetado el sistema de incompatibilidades que existe, y al respecto ha afirmado que no ha sido desautorizado por el presidente del Congreso, Jesús Posada.


Hernando ha explicado que su opinión personal es que "la gente puede entrar y salir de la política independientemente de cuál sea su profesión". "Esto es a lo que yo me he referido y no a otra cosa", ha apuntado.


En ese sentido, ha apuntado que "evidentemente todas aquellas (profesiones) que son incompatibles están al margen de la ley y ahí no hay flexibilidad porque las reglas están clarísimas". "Es eso de lo que estoy hablando y si otros interpretan otra cosa me parece que están equivocados", ha insistido.


Asimismo, preguntado por si se siente desautorizado por el presidente del Congreso, ha replicado: "A mí no me desautoriza el presidente del Congreso, me paree que sabe que hay un reglamento y una comisión del Estatuto del Diputado que determina las incompatibilidades".


De hecho, ha afirmado que "se puede ser secretario general del PSOE y ser diputado" o "miembro destacado de una formación política y ser diputado o ser médico o abogado y ser diputado". "Hay muchas compatibilidades, lo dice la Loreg y la Comisión del Diputado, que es la que autoriza los casos previstos en la Ley".


Preguntado por si esta compatibilidad se extiende también a una relación laboral con una constructora que quiera presionar a un parlamentario, ha argumentado que "si hay alguien que pretende comprar a un diputado pues evidentemente eso se sabe y se conoce y es absolutamente punible". Por tanto, lo que "hay que hacer es respetar las normas, las leyes, y ser transparente" y comprar a un diputado "se llama cohecho y es un delito que está penado". Sin embargo, ha destacado que "gracias a las reformas que hemos hecho hoy es más fácil luchar contra la corrupción y el fraude".Sistema estricto

En ese sentido, ha reiterado que el sistema que tenemos es "uno de los más estrictos que tiene en estos momentos cualquier parlamento" y además "se ha demostrado como positivo". Asimismo, ha recalcado que se cuenta con un sistema de transparencia "muy intenso" ya que se los diputados deben declarar su patrimonio, las modificaciones en el mismo, así como el IRPF a la salida y a la entrada. "Esto no se hacía antes y lo demos hecho nosotros", ha destacado.

Del mismo modo, ha resaltado que se han realizado una serie de modificaciones legislativas para "luchar contra la corrupción y dar más transparencia al sistema político".