Maridar con cócteles con mucha gracia en Bloody de Zaragoza

"Esto no es un restaurante con cócteles, sino una coctelería con comida". Así se definen en Bloody. En este establecimiento han comenzado el verano con una nueva carta donde comer y beber van muy de la mano. Los cócteles que han preparado en la nueva propuesta son todo una declaración de intenciones, diferenciadas entre clásicos, éxitos, más elegantes o con matices mediterráneos.

Las propuestas están muy mimadas, tras las que se esconden horas de investigación del encargado Geovanny Falcones y los cocteleros Sara Pérez y Fran Arias. Uno de los que más cautivan es Empeltre, como cierto homenaje a la tierra aragonesa, ideal para acompañar un aperitivo. Está elaborado en base a vermú blanco, un cordial de aceituna de la variedad que le da nombre y una limonada también de aceitunas. La presentación es en una elegante copa con un hielo prismático que permite que el sabor se mantenga de principio a fin junto a las persistentes burbujas.

Otras de las propuestas de este céntrico bar son Di Parma, que ofrece matices italianos gracias al sirope de queso parmesano, o Pisco Herbal, en el que las hierbas del monte aragonés cobran especial protagonismo. Cada componente de los cócteles está puesto adrede para que combine a la perfección con la comida. Jorge Cano y Mónica Benítez, en la cocina, ofrecen platos como gyozas de cerdo en curry verde o tacos de costillas con una salsa ligeramente picante. La maestría con las carnes es excepcional, lo demuestran con sus cortes como el ‘tomahawk’, chuletón de lomo alto o la entraña de ternera. "Los sabores latinoamericanos y asiáticos los conseguimos con producto aragonés", explica Arias.