¿Qué tipo de roscón se adapta a tu personalidad?

Aunque el origen del roscón nada tiene que ver con la llegada de los Reyes de Oriente al portal de Belén, son pocas las casas en Aragón que no disfrutan de este dulce navideño con siglos de historia la mañana del seis de enero. Sin perder los orígenes, este bollo ha sabido renovarse y adaptarse a los tiempos (hay opción 'light' para los menos lamineros) para que nadie se quede sin su porción el Día de Reyes, pues, además, su magia reside en sus posibilidades y en sus personalidades.

Para los cocinillas, un roscón familiar 'homemade'. Si eres de los que disfruta rodeándose de sus seres queridos y de los que consigue que en su casa se respire olor a Navidad, la mejor opción para ti es la del roscón casero. Para no fallar con la receta el chef Óscar Gaspar, jefe de cocina del restaurante Ibaizabal, en el hotel Barceló Bilbao Nervión, aconseja utilizar ingredientes frescos y de primera calidad: "La clave para que el bollo quede perfecto es respetar los tiempos de fermentación de la masa madre y de la masa". También recuerda que, una vez haya doblado su volumen, hay que darle forma y dejarlo en el horno 18 minutos. "Cuando lo saquemos, añadiremos el azúcar espolvoreado, la fruta escarchada y las almendras molidas", añade.  Para los más golosos, la nata es la clave. No le das tanta importancia a la decoración del árbol, a las luces que adornarán tu ciudad, o a si nevará para poder irte a esquiar, porque lo que realmente te importa es encontrar un roscón relleno cuya nata esté a la altura de tus exigentes papilas gustativas. "El secreto de esta es que esta tenga más del 35% de materia grasa. Es imprescindible mantenerla fría mientras la batimos", asegura el chef. Para eso, hay que poner un bol con agua y cubitos de hielo y un puñado de sal gorda y encima otro bol con la nata (fría de la nevera); "de esta forma conseguiremos mantener de forma estable la temperatura de la nata entre 5 y 10 ºC", explica el chef. Para los que aprecian una buena masa y no les hace falta más. Eres fiel a tus costumbres y año tras año llenas tu casa de luces, te compras un calendario de adviento, cantas villancicos y no te pierdes ni una película de Navidad… Sin duda alguna eres del roscón de toda la vida, el original y tradicional, el que lo único que lleva es la fruta escarchada por encima. Para los amantes del plan estrella invernal: manta, peli…¡y helado! En estos días de frío, nada te apetece más que sumergirte bajo la manta para disfrutar de la Navidad desde la comodidad de casa y de alguno que otro capricho, como, por ejemplo, el helado elaborado a base de masa artesana de roscón con un toque de zumo de naranja y agua de azahar, endulzado con nata y fruta escarchada es tu 'partner in crime'. ¡Palabra del chef Óscar Gaspar! ¡Camarero, un roscón en copa de cocktail, por favor! No eres de quedarte en casa disfrutando de la Navidad, sino de ir de fiesta en fiesta, visitar los locales de moda e innovar. Por eso, eres de los que se bebería el roscón si pudiera. ¿Cómo? En un cóctel elaborado a base de 40 ml de ginebra, 20 ml de sirope simple, 20 ml de sirope de almendra y azahar, 60 ml de bebida de soja, 40 ml de zumo de naranja y soja, y 60 ml de té verde y cereza. ¿Te atreves a probarlo?