Nunca antes un libro había ayudado tanto a mejorar un bloque de pisos. El Libro del Edificio Existente surgió en 2021 con un único propósito, el de evaluar y analizar por completo las edificaciones para conocer sus posibles problemas o mejoras. Puede ser una herramienta indispensable para las comunidades de propietarios, pero muchas veces pasa desapercibido o es un gran desconocido. ¿Para qué sirve realmente?

"El Libro del Edificio es un instrumento que se ha creado a base de fondos europeos para que que las comunidades de propietarios tengan un instrumento donde esté toda la información relevante del edificio. Sirve, además, para que un profesional, un arquitecto o un arquitecto técnico evalúe cuál es el estado del edificio, cuáles son sus necesidades o sus potenciales mejoras", indica Teresa Navarro, jefa del Servicio de Arquitectura del Gobierno de Aragón. Así, las comunidades de vecinos conocen aquello que deberían acometer de forma urgente, lo que se puede posponer o cómo podría mejorar para ahorrar energía, cumplir con temas de accesibilidad, etcétera.

Aunque existe una línea de ayudas para financiar estos estudios, su plazo en Aragón terminó el pasado 31 de octubre. "Ahora mismo estamos tramitando la resolución, que esperamos que esté a principios de año", añade Navarro, de tal manera que durante el 2024 se abrirá una nueva convocatoria para financiar parte de los honorarios de redacción de proyectos técnicos de rehabilitación integral de edificios.

Zaragoza Vivienda/Ayuntamiento de Zaragoza

Las funciones más importantes de este documento, apuntan desde el Colegio Oficial de Arquitectos de Aragón (COA), pasan por, principalmente, conocer el estado actual del edificio. "Características constructivas; estado de conservación y mantenimiento y deficiencias constructivas funcionales, de seguridad y de habitabilidad que observe el técnico...", enumeran desde la institución. Del mismo modo, se evaluará el comportamiento energético del edificio y la emisión del Certificado de Eficiencia Energética. La mayoría del parque de edificios de Zaragoza, por ejemplo, está construido antes de los años 70, por lo que tiene criterios de eficiencia energética muy bajos.

"Otro de los objetivos del Libro del Edificio Existente es reflejar las ventajas que la rehabilitación puede tener para el edificio o la vivienda con un diagnóstico del potencial de mejora", ya sea energético o de cumplimiento de otros requisitos funcionales -seguridad estructural, habitabilidad, utilización, prevención de incendios, acústica, accesibilidad, entre otros-. Además, se identificarán mejoras concretas en un plan de actuaciones para la renovación del edificio que refleje el nivel de avance más alto que puede alcanzar el edificio con sus fases de ejecución y presupuesto.

Con estas medidas, citan en el colegio, se podría contribuir a reducir las emisiones así como el ahorro de energía estimado, en un porcentaje que va desde el 30% hasta un 60%. Es decir, además de mejorar la sostenibilidad, se podría conseguir un alto nivel de eficiencia energética y, como consecuencia, un ahorro en la factura de la luz y un mayor nivel de bienestar.

Para la redacción del Libro del Edificio Existente, el COA y la Oficina de Apoyo a la Rehabilitación ofrecen la red de arquitectos de Aragón, un buscador que permite localizar a algunos de los arquitectos del territorio aragonés y seleccionarlos en función del servicio profesional que precises. Para acceder a esta web, pincha en este enlace.