agricultura
Mas unidos para ser más precisos
La Asociación Nacional de Agricultura de Precisión (ANAP) nace con el objetivo de impulsar que los agricultores puedan implantar estas prácticas en sus explotaciones.
El pasado mes de junio se presentaba en el marco del Congreso Europeo de Agricutura de Precisión (ECPA por sus siglas en inglés), celebrado en Bolonia, la Asociación Nacional de Agricultura de Precisión (ANAP) de España. Esta asociación nace "para fortalecer la transferencia de conocimiento y dar apoyo técnico para que los agricultores puedan implementar estos avances", explica Javier García Ramos, director de Escuela Politécnica Superior de Huesca y uno de los socios fundadores de ANAP.
"En lo que respecta al desarrollo, la tecnología de la agricultura de precisión está muy madura, pero a nivel de puesta en práctica está muy ‘verde’", añade García Ramos, que achaca esta situación a la existencia de explotaciones "muy envejecidas" y a la necesidad de una "alta profesionalización y de estar continuamente al día de los nuevos avances tecnológicos".
ANAP se trata, pues, "de un espacio para el intercambio de conocimientos, experiencias y recursos de valor sobre Agricultura de Precisión y digitalización agrícola a fin de facilitar la obtención de los beneficios económicos ambientales y sociales de su adopción por parte de las personas y entidades del sector agroalimentario".
La agricultura de precisión, según define la Sociedad Internacional de Agricultura de Precisión, es una estrategia de gestión que recoge procesa y analiza datos temporales, espaciales e individuales y los combina con otras informaciones para respaldar las decisiones de manejo de acuerdo con la variabilidad estimada y así mejorar la eficiencia en el uso de recursos, la productividad, la calidad, la rentabilidad y la sostenibilidad de la producción agrícola. "Se trata de que los agricultores puedan recoger información de su parcela, hasta un nivel que puede llegar a un árbol individualizado, para que puedan obtener mensajes diferenciados ya que no todas las plantas de una misma parcela pueden requerir lo mismo", explica García Ramos.
Promover la adopción de estas prácticas agrarias o conectar los recursos del sector ya sean resultados de experiencias o de investigaciones, soluciones de empresas privadas ayudas y subvenciones o bien recursos formativos para crear un cuerpo de conocimiento dinámico y disponible para todos los asociados son algunos de los fines de ANAP, que también pretende "impulsar la cooperación de valor entre agentes que adopten la agricultura de precisión", así como "establecer sinergias con otras entidades ya sean del sector agroalimentario o de otros sectores que puedan aporta conocimientos y experiencias".
Congreso bienal
La celebración de una jornada de transferencia de conocimiento para conectar a los socios entre sí y la celebración de un congreso científico bienal son algunas de las primeras iniciativas concretas que ANAP quiere poner en marcha. "El objetivo final es que los agricultores tomen conciencia de las ventajas de implementar estas tecnologías".
La asociación, que tiene como primer presidente a José María Terrón López, se encuentra inmersa en un período abierto de inscripción de socios. ANAP está abierta no solo a los agricultores que se interesen por la agricultura de precisión, sino a personas de otros muchos ámbitos como pueden ser asociaciones sectoriales, investigadores del ámbito agroalimentario, estudiantes, empresas y cooperativas agroalimentarias, entidades públicas u organizaciones de consumidores y usuarios entre otros. El único requisito, recalca Javier García Ramos, es "estar implicado y querer promover y compartir conocimientos y experiencias relacionadas con las soluciones que puede aportar al sector agroalimentario la agricultura de precisión".
