Los regantes de Bardenas finalizan este viernes su campaña de riego. Los responsables de la comunidad de riegos se han visto obligados a adelantar este cierre ante la dramática situación del embalse de Yesa que apenas cuenta con una reserva de 56 hectómetros cúbicos, según los últimos datos de la Confederación Hidrográfica del Ebro.

La decisión la tomó la Junta de Gobierno de la Comunidad General de Regantes del Canal de Bardenas, que acordó este jueves finalizar la campaña dos semanas antes de lo habitual con el objetivo de tratar de recuperar las reservas y poder dar comienzo el periodo de mantenimiento del Canal de Bardenas, acequias principales y redes secundarias.

"Ha sido un año hidrológico muy complicado", señalaron ayer desde este sistema de riego, que recordó que esta ha sido la campaña con menos aportaciones de la historia de Bardenas (un 17,4% menor que el anterior periodo más seco). A ello se ha sumado, añadieron, la carencia de precipitaciones en la zona regable (un 46% menos respecto de la media de los últimos 10 años) y unas altas temperaturas en primavera y verano que dispararon prolongadamente las necesidades hídricas de los cultivos.

De hecho, la campaña ya comenzó el pasado 9 de marzo con la necesidad de establecer cupos cuando la reserva hídrica total se situaba entonces en el 69%. Aunque la situación mejoró en abril con un prematuro deshielo y un episodio de lluvias, el 19 de mayo el volumen embalsado en Yesa comenzó a situarse en nivel de prealerta y en los últimos tres meses se ha mantenido en nivel de emergencia.

"Todo ello ha provocado que se produjeran importantes restricciones de riego, especialmente en cultivos de alto valor añadido, lo que ha derivado en pérdidas de cosecha", explicaron este jueves los responsables de esta comunidad de regantes, que advirtieron además de la "gran incertidumbre con la que se encaran las próximas siembras de otoño".

Falta de regulación

Y es que, la campaña 2021-2022 acaba en niveles mínimos históricos, lo que genera una gran preocupación entre los regantes de este sistema ya que "de nuevo deja a la campaña que viene al azar de la climatología", señalaron desde la comunidad general. Y denunciaron, que la situación que vive esta zona refleja "la falta de regulación estructural que padece este sistema de riego y pone nuevamente que el presente y futuro de Bardenas pasa por la terminación de la obra del recrecimiento del embalse de Yesa, la terminación de los planes coordinados, la modernización de regadíos y la gestión del recurso".